Los cambios migratorios anunciados en octubre del pasado año entraron este lunes en vigor en la Isla. Largas filas de personas se encuentran desde esta mañana en las oficinas del Carné de Identidad y Registro de Población así como de Inmigración y Extranjería habilitadas para la actualización de los pasaportes y otros trámites.
Algunos elogian la nueva medida tan esperada por los cubanos desde hace varias décadas, otros muestran desconfianza y escepticismo con el tema. Hoy un equipo de periodistas de OnCuba salió a las calles de La Habana para conocer cuáles son las principales expectativas de la gente. Muchos se rehúsan a hablar. Prefieren esperar a que los días pasen porque según ellos es muy pronto para opinar.
Para Ariel, estudiante de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI), quien nunca ha viajado fuera de Cuba, la medida es sobre todo un halo de esperanzas. Dice no interesarle demasiado si en estos primeros días las embajadas le niegan la visa, porque cree que será algo que luego se estabilizará, pero el primer paso era el más importante.
María del Carmen, quien se encontraba en la Oficina de 17 y K en el Vedado, es médico y aunque sabía ya que para ella esta medida tenía sus especificidades, prefirió ir personalmente hasta la oficina, porque quien quita, nos dijo, que con la confusión del primer día ni siquiera se percaten que soy médico. “Me parece, aclara, que esta ley debe ser más flexible para algunas profesiones. O los jóvenes terminarán no optando por carreras que puedan luego convertirse en un gran obstáculo para viajar”.
Jorge y Lucía son los padres de Karina. Hoy están desde temprano en la oficina del carnet de identidad para actualizar el pasaporte de su hija de 7 años. Para ellos, este es sin duda alguna, la mejor de la noticias del cambio de leyes porque “era un absurdo que los niños no pudieran viajar con sus padres”.
Después de una larga jornada mañanera nos fuimos a la Oficina de Intereses de Estados Unidos en Cuba para intentar conversar con alguna persona que pudiera hablarnos acerca de este tema. Allí nos atendió Lynn Roche, jefa de la Oficina de Prensa y Cultura de la Sección de Intereses de Estados Unidos en la Isla y, aunque nos aclaró que no podía darnos una entrevista sin la autorización de Washington, sí podía responder a algunas de nuestras dudas.
Cuando le preguntamos si la el gobierno de Estados Unidos tomaría alguna medida a partir de las nuevas regulaciones cubanas, nos respondió que por ahora todo continuaría igual.
“Seguiremos atendiendo la misma cantidad de personas que atendíamos hasta ahora (de 350 a 400 cada día). Nuestra oficina desde hace tres meses ha ido agilizando las citas de los cubanos residentes en la Isla para apresurar estos trámites que demoraban antiguamente hasta 5 años. Ahora será un año como máximo”.
“En cuanto a las visas, nuestro interés es que las personas que acuden a la Oficina en la Habana puedan probar que tienen razones para regresar al país después de su visita a los Estados Unidos”.
“Abogamos por una migración ordenada y segura y nuestro interés es poder atender a todas las necesidades de los ciudadanos cubanos que acudan a nosotros”.
Yo pienso que debe ser parejo para todos , si no dejan salir a un profecional , ni a un deportista ,pues nadie estudiaría mas , Fidel dijo en el 80 el que quiera que se baya , todos no se quedarán , como dise Fabré lo mejor es salir y regrezar a Cuba ,
ES ABSURDO TENER QUE POSEER UNA VISA PARA ENTRAR AL PAIS DONDE HAS NACIDO Y QUE POR UNA MALA POLITICA MIGRATORIA Y RETROGRADA TUVIMOS QUE SALIR DE EL DE MANERA DEFINITIVA Y DE HECHO PERDIENDO NUESTRO ESTATUS DE CIUDADANO CUBANO.SOLO ESO SE VE EN CUBA.
Exactamente yo tube que salir así obligado a escoger no es justo siempre e amado donde nací i bine por estar con mi padre que sin embargo el si puede regresar el día que quiera es injusto e inhumano. Espero que cambien la leyes
veremos cuantos cubanos podran viajar porque no todos tienen dinero para hacerlo! no son solo las leyes cubanas, ningun pais del mundo quiere imigrantes
En estas leyes no hay nada diferente excepto que los niños podrán viajar con los padres ( a aquellos paises que le otorguen visa) que esono sera nada fácil, porque no darian a basto y se llenarian los paises de cubanos, eso es absurdo. Por otra parte los profesionales los manejan los diferentes Ministerios como su propiedad que son, dejarlos salir o no depende de otros y no de ellos mismos si quieren o no quieren, el mismo perro con diferente collar.Y a todo el que inmigración y extranjeria de Cuba les parezca no lo dejaran salir poniendo cualquier excusa, asi es que de cambio nada, hay que bajarse de esa nube y vivir la realidad.
La reforma migratoria que el lunes entra en vigor en Cuba, que flexibilizará los viajes al extranjero, no se traducirá en una migración masiva de cubanos a Miami, aunque sí supondrá un claro traslado de la presión hacia Estados Unidos, según analistas y exiliados.”En Miami desde luego poco se va a notar. De eso podemos estar seguros”, dijo Jaime Suchlicki, responsable del Proyecto sobre la Transición en Cuba del Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos de la Universidad de Miami.La reforma migratoria cubana permitirá a los cubanos viajar al extranjero sin necesidad del restrictivo permiso de salida que estuvo vigente durante décadas, y además flexibiliza movimientos de residentes y emigrados, aunque mantiene algunas limitaciones.De acuerdo a la nueva norma, sólo se exigirá la presentación del pasaporte corriente actualizado y la visa del país de destino para salir de Cuba.En su opinión, “está claro que los cubanos van a ir a hacer colas a las diferentes embajadas del país y allí van a ver que no se les van a dar muchas visas a los cubanos, sino muy pocas”, porque “nadie quiere grandes cantidades de cubanos”.”la emigración es muy usual vista debido a las minimas oportunidades economicas en cuba que existen España les dará cien o doscientas visas al año, México cincuenta, … cantidades todas muy pequeñas, así que la posibilidad de que veamos a grandes cantidades de cubanos saliendo del país no es realista”, defendió el analista.Estados Unidos tiene un acuerdo con el Gobierno de Cuba para conceder 20 mil visados permanentes al año, pero “da muy pocas visas de turista, y de buenas a primeras no va a empezar a hacerlo para que vengan todos a Miami”, defendió Suchlicki.El analista teme que los cubanos se vayan a llevar “una gran desilusión”, ya que los podrán salir serán los que “tengan familia en Miami y que le puedan mandar los dólares para comprar un pasaporte y un pasaje”.Suchlicki, como otros expertos consultados, considera que el efecto más claro fuera de Cuba de esta medida va a ser “la presión en las embajadas de gente pidiendo visados”, en Estados Unidos y en otros países.Incluso, consideró que éste podría ser el primer paso para que Estados Unidos aplicara cambios en su política migratoria con respecto a Cuba e incluso llegara a eliminar la ley que ahora permite quedarse legalmente a todo cubano que toque tierra cuando llega por mar.”Creo que básicamente no va a pasar nada extraordinario”, apuntó en este mismo sentido Eugenio Yáñez, analista y editor de Cubanalisis.com.”El problema ya no va a ser salir, sino entrar”, porque quedan “muy pocos países que los vayan a recibir y muchos no disponen de dinero”, afirmó.”Con un pasaporte norteamericano puedo ir casi a cualquier lugar, pero con uno cubano no: ni a Estados Unidos, ni a la Unión Europea ni a muchos países de Latinoamérica, a excepción de Ecuador o Venezuela”, aseguró.Sin embargo, Yañez dijo que no cree “que la gente que se quiera ir de Cuba sea para ir a Venezuela con la situación que hay”, al tiempo que “Ecuador en cualquier momento va a modificar su norma porque ya tiene a más de 100 mil cubanos a los que se les ha vencido la visa y están allí de ilegales”.A todo ello se suma, que los pasaportes cubanos tienen que estar ‘habilitados’: “A los deportistas y ciertos artistas no los van a dejar salir y tampoco a quienes puedan resultar incómodos, como disidentes, que no saldrán aunque tengan 17 visas”, aseguró.De la misma opinión es Janisset Rivero, directora del Directorio Democrático, quien explicó en Miami que aunque desaparece la llamada “tarjeta blanca” se requiere en el pasaporte un sello de aprobación por el Ministerio del Interior, lo que “permitirá al régimen impedir la salida de los opositores”.Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia, ve además en este proceso un intento de “poner presión al Gobierno de Estados Unidos para convertirlo en un factor de negociación y lograr alguna concesión en una coyuntura económica muy desfavorable para Cuba”.En su opinión, con esta medida tampoco se va a terminar con los balseros.
“Lo único que acabaría con eso sería que Estados Unidos diera visas a todo el mundo, pero eso no va a suceder y menos en momentos en que el debate migratorio es tan fuerte en este país”, argumentó.
La reforma migratoria que el lunes entra en vigor en Cuba, que flexibilizará los viajes al extranjero, no se traducirá en una migración masiva de cubanos a Miami, aunque sí supondrá un claro traslado de la presión hacia Estados Unidos, según analistas y exiliados.”En Miami desde luego poco se va a notar. De eso podemos estar seguros”, dijo Jaime Suchlicki, responsable del Proyecto sobre la Transición en Cuba del Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos de la Universidad de Miami.La reforma migratoria cubana permitirá a los cubanos viajar al extranjero sin necesidad del restrictivo permiso de salida que estuvo vigente durante décadas, y además flexibiliza movimientos de residentes y emigrados, aunque mantiene algunas limitaciones.De acuerdo a la nueva norma, sólo se exigirá la presentación del pasaporte corriente actualizado y la visa del país de destino para salir de Cuba.En su opinión, “está claro que los cubanos van a ir a hacer colas a las diferentes embajadas del país y allí van a ver que no se les van a dar muchas visas a los cubanos, sino muy pocas”, porque “nadie quiere grandes cantidades de cubanos emigrantes por su naturaleza. “España les dará cien o doscientas visas al año, México cincuenta, … cantidades todas muy pequeñas, así que la posibilidad de que veamos a grandes cantidades de cubanos saliendo del país no es realista”, defendió el analista.Estados Unidos tiene un acuerdo con el Gobierno de Cuba para conceder 20 mil visados permanentes al año, pero “da muy pocas visas de turista, y de buenas a primeras no va a empezar a hacerlo para que vengan todos a Miami”, defendió Suchlicki.El analista teme que los cubanos se vayan a llevar “una gran desilusión”, ya que los podrán salir serán los que “tengan familia en Miami y que le puedan mandar los dólares para comprar un pasaporte y un pasaje”.Suchlicki, como otros expertos consultados, considera que el efecto más claro fuera de Cuba de esta medida va a ser “la presión en las embajadas de gente pidiendo visados”, en Estados Unidos y en otros países.Incluso, consideró que éste podría ser el primer paso para que Estados Unidos aplicara cambios en su política migratoria con respecto a Cuba e incluso llegara a eliminar la ley que ahora permite quedarse legalmente a todo cubano que toque tierra cuando llega por mar.”Creo que básicamente no va a pasar nada extraordinario”, apuntó en este mismo sentido Eugenio Yáñez, analista y editor de Cubanalisis.com.”El problema ya no va a ser salir, sino entrar”, porque quedan “muy pocos países que los vayan a recibir y muchos no disponen de dinero”, afirmó.”Con un pasaporte norteamericano puedo ir casi a cualquier lugar, pero con uno cubano no: ni a Estados Unidos, ni a la Unión Europea ni a muchos países de Latinoamérica, a excepción de Ecuador o Venezuela”, aseguró.Sin embargo, Yañez dijo que no cree “que la gente que se quiera ir de Cuba sea para ir a Venezuela con la situación que hay”, al tiempo que “Ecuador en cualquier momento va a modificar su norma porque ya tiene a más de 100 mil cubanos a los que se les ha vencido la visa y están allí de ilegales”.A todo ello se suma, que los pasaportes cubanos tienen que estar ‘habilitados’: “A los deportistas y ciertos artistas no los van a dejar salir y tampoco a quienes puedan resultar incómodos, como disidentes, que no saldrán aunque tengan 17 visas”, aseguró.De la misma opinión es Janisset Rivero, directora del Directorio Democrático, quien explicó en Miami que aunque desaparece la llamada “tarjeta blanca” se requiere en el pasaporte un sello de aprobación por el Ministerio del Interior, lo que “permitirá al régimen impedir la salida de los opositores”.Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia, ve además en este proceso un intento de “poner presión al Gobierno de Estados Unidos para convertirlo en un factor de negociación y lograr alguna concesión en una coyuntura económica muy desfavorable para Cuba”.En su opinión, con esta medida tampoco se va a terminar con los balseros.
“Lo único que acabaría con eso sería que Estados Unidos diera visas a todo el mundo, pero eso no va a suceder y menos en momentos en que el debate migratorio es tan fuerte en este país”, argumentó.
hola tengo una pregunta que hacerles tuve una entrevista para salida definitiva y me denegaron quisiera saber si por ser ingeniera civil me proiven la salida definitiva de cuba ya que se han puesto en marcha las nuevas regulaciones de la embajada americana en cuba