El Zoológico Nacional de Cuba, principal institución de su tipo en la Isla, anunció el nacimiento el pasado 6 de septiembre de una cría de rinoceronte blanco.
En su perfil de Facebook, el parque situado en la periferia de La Habana, dio la bienvenida con “enorme orgullo” a la pequeña rinoceronte hembra, la cual fue bautizada como “Esperanza Mel”. La publicación asegura que hacía 15 años que no nacía en la institución un nuevo ejemplar de esa especie.
La cría nació “exactamente a las 10:04 am” en la Pradera Africana, una de las partes principales del zoológico, hecho que fue posible “luego de 18 meses de gestación y tras un arduo trabajo de observación y control por parte de técnicos, médicos, biólogos”.
Esperanza Mel se encuentra “en buen estado de salud” y junto a su madre, que “la amamanta sin ningún temor”. El post del Zoológico también aclara que la cría “posee muy buenos reflejos de succión y ante amenazas se esconde detrás de su mamá, quien la protege con mucho amor”.
https://www.facebook.com/zoologiconacionalcuba/posts/1158147611023318?__xts__[0]=68.ARBeESAFZs39GWXptr-3Ie-wc0YwweWAu0gXlMPcXaU71dlzzWCg2ysn0ymq3_k-6dHLyzzfzKso3k15bSx2hdisGN0fLzklniZ0B7z11fJ-m7858hlpRVQ-4O8bPF16ep7bOa6IWrrfUZSO7g4vu74nIR9ea_HyaS1mYloTL6L-w9wysha0TciMPk0pLRpc-0lXlWDmM2_r8rLpk2mYNM6z38LgC57fYmS5Skc4oylsTZhdMOxiuNu19Z1RWSv5NRta2XXh5O3gCcyzNrhCi0EzHMPCz5mPWe2D1i7pszKrn7UEnacSLRS0ukSmnhdwTrdCDayonv45IbZD86lsBJSLag&__tn__=-R
La publicación no especifica a cuál subespecie de rinoceronte blanco –en realidad no son de ese color, sino entre gris y marrón claro– pertenecen la cría y su madre. Existen dos: la del norte, prácticamente extinguida, y la del sur, en mejor estado de conservación, pero es de suponer que las del parque cubano pertenecen a la segunda subespecie, que cuenta con poblaciones en varios países del sur del continente africano y también con ejemplares en diversos zoológicos del mundo.
El Parque Zoológico Nacional de Cuba tiene una superficie superior a las 300 hectáreas y una importante colección de animales, entre ellos de leones y animales de la sabana africana, que no se exhiben en jaulas sino en espacios abiertos que asemejan su hábitat natural.
Buena parte de ellos llegaron a Cuba seis años atrás como parte de una donación de Namibia, compuesta por más de un centenar de ejemplares de 22 especies que en ese momento renovó las colecciones existentes y dio un nuevo aire a la institución.