Osleni Guerrero se proclamó subcampeón del Torneo Panamericano de Bádminton 2012, con sede en Lima, Perú, un metal que es un nuevo mérito agregado a su carrera que incluye, además, el subtítulo de los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011. El joven capitalino es el cubano con mejor posición histórica en el ranking mundial, actualmente el lugar 121 con un total de 13250 puntos (actualización del 18 de octubre de 2012). Por estos días, cuando acaba de cumplir sus 24 años, accedió a conversar con Oncuba:
¿Primeros pasos?
En la instalación deportiva municipal “Ponce Carrascón “en Centro Habana, bajo las órdenes del profesor Luis Alberto Lara que en ese tiempo era el entrenador deportivo de mi deporte. Él fue quien me descubrió y me captó cuando cursaba la escuela a primaria en el Centro Rafael Ángel Carini.
Ahí se enmarca mi comienzo, al que siempre le atribuyo gran importancia ya que tuve la oportunidad de entrenar siempre con atletas de categorías superiores y eso me ayudó a desarrollarme una mentalidad competitiva.
¿Cómo influyó en tu desarrollo el ser catalogado como “promesa” del bádminton en Latinoamérica?
Fue importante porque el ser consciente de que me veían con perspectivas me animó a salir adelante y a mantenerme enfocado en mis objetivos sin pensar en los factores que incidían negativamente en ello. Tuve que superar varios años de preparación defectuosa, y luchar contra obstáculos que me limitaban tanto de entrenar a plenitud como de estabilizar mi preparación para los eventos.
Con el subtítulo logrado en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 te convertiste en el primer medallista de Cuba en este deporte en el área.
¿Significado de ese resultado?
Estuve en la edición de los Juegos de Rio2007 y tomé la experiencia con la seguridad de que podía tener un mejor rendimiento. Me propuse que en 2011 podría estar entre los medallistas y para eso trabajé. El conseguir el subtítulo fue un momento de alegría y de mucha emoción. Me siento orgulloso, sé que puedo decir que fui el primer cubano medallista panamericano en mi deporte y eso es muy importante para mí. Además me llenó de satisfacción en lo personal porque cumplí la promesa que le había hecho a mi madre, un resultado en un evento importante es lo que siempre le quise dedicar.
¿Papel de la Federación Panamericana en el desarrollo de tu carrera?
La Federación Panamericana, radicada en Perú, ha jugado un papel decisivo en mi carrera. El objetivo fundamental de esta organización en el área es desarrollar atletas con vista a obtener resultados que puedan poner en alto al continente en eventos de primer nivel tales como los mundiales y los juegos olímpicos. Yo he sido parte de ese programa y este ha potenciado mucho mi formación porque me ha propiciado el entrenar fuerte y superarme constantemente al estar en contacto con atletas de mucho talento. A su vez, la Federación cubana lleva mucho mérito porque ha trabajado durante muchos años para lograr resultados importantes y en cuanto a mi caso particular siempre he contado con todo el apoyo por parte de ellos.
¿Cómo describes tu juego?
Las potencialidades de mi juego se centran en tres direcciones: fuerza, rapidez y resistencia. Esos son los elementos fundamentales que han hecho que mi capacidad física sea un eslabón importante ante los contarios.
¿A cuál de estos factores le sacas más provecho en un partido?
A la resistencia. Acá en nuestro continente son pocos los atletas que se caracterizan por tener una elevada capacidad física y eso me ayuda a aprovecharlo como una ventaja. Es diferente con jugadores asiáticos y europeos, porque tienen otro tipo preparación y su nivel de juego es mucho más fuerte y exigente.
¿Qué sensación te llevas del Campeonato Panamericano que acabas de jugar?
Fue una buena experiencia para mi carrera, un torneo donde el nivel fue estable y los jugadores estuvieron a la altura que se espera para el evento más importante de área. Mi desempeño en este campeonato fue válido y pienso que jugué a un buen nivel, sobre todo estoy satisfecho porque mejoré varios elementos técnicos en los que me debía superar. Me brindó también la oportunidad de ver y conocer a los contrarios.
El guatemalteco Kevin Gordon se ha vuelto tu gran rival; cediste ante él en la final de los Juegos Panamericanos y ahora en Torneo Panamericano. ¿Hay algo en su juego que no logras descifrar?
Reconozco que Kevin es un buen jugador, ha alcanzado un gran nivel que le ha permitido estar en dos olimpiadas y en varios campeonatos mundiales. Se me hace difícil, tiene mucha experiencia que le ha dejado el asistir a torneos de clase mundial, yo no he tenido las mismas oportunidades en ese sentido. De todas maneras, aunque no me enfoco en un jugador en específico sino en el rival que me toca según la competición, con Kevin tenemos una especie de guerra particular, una batalla de muchos años en la que él lleva ventajas pero que no está terminada en lo absoluto.
Planes y objetivos futuros
Tengo planificado terminar con los eventos programados, el más importante es el IV Torneo Abierto Internacional de México que será en noviembre. Lo importante es cosechar todos los triunfos posibles con vista a mejorar en ranking mundial. La próxima temporada será para mí otro año de trabajo; superarme y trabajar en limar las deficiencias que he tenido en esta temporada para que los resultados sean satisfactorios. Avanzar hacia el perfeccionamiento de mi juego y tratar siempre de superarme, es lo más importante en estos momentos.