May Gamboa Cruz
Habana Jazz Social Club nació el día de San Lázaro, 17 de diciembre, durante el primer ensayo que tuvo Nachito Herrera para su presentación en el Jazz Plaza. Desde 1995 este virtuoso del piano no tocaba en su tierra.
“Con el concierto del 22 de diciembre Habana Jazz Social Club quedó bautizado. El proyecto cuenta con tres percusiones, tres trompetas, dos saxofones, trombón, bajo, piano, dos cantantes y la pareja de baile Los Santos. Todos son músicos con los que he trabajado anteriormente y en estos momentos ya estamos programando las presentaciones por Estados Unidos para el 2013”, cuenta Nachito Herrera a OnCuba.
Con este proyecto Nachito Herrera, quien reside en Minnesota desde hace más de 12 años, pretende hacer una fusión de toda la música y constituye un tributo a Pío Leyva, Ibrahím Ferrer, Lilí Martínez, Rubén González, Frank Emilio, a todos aquellos que iniciaron la música tradicional cubana como Compay Segundo, y los que encabezaron el movimiento del jazz en Cuba, como Antonio María Romeu y Gonzalo Romeu.
En el Jazz Plaza Nachito Herrera compartió el escenario con la Orquesta Sinfónica Nacional. Un mes antes Nachito fue invitado por el director de esta agrupación el maestro Enrique Pérez Mesa a ser el solista en los más de 20 conciertos que por primera vez ofrecieron en Estados Unidos. “Esa gira acrecentó el compromiso que tengo con la música y con los músicos cubanos de continuar representando a mi país donde quiera que me encuentre, hasta que cierre mis ojos; aunque dicen que cuando eso pasa uno regresa en espíritu, así que seguiré apoyando en espíritu y en alma a la música cubana.
Durante la gira, el público se impresionaba mucho por la versatilidad de la orquesta, que puede tocar todos los estilos de la música clásica y además de la música cubana y en esas presentaciones me percaté que el público americano está sediento de nuestra música”, afirmó el músico.
A sus 46 años Nachito tiene mucho que agradecer a Cuba por su formación y ve con optimismo el talento de las nuevas generaciones de músicos. “En mi país siempre se ha defendido mucho la juventud, las ideas jóvenes, en eso creo que les llevamos un poco de ventaja a los estadounidenses. Por eso me emocionó tanto saber que hace poco Aldo López-Gavilán se presentó en el Carnegie Hall, de Nueva York, uno de los más prestigiosos teatros del mundo, esa es una buena señal, pues demuestra que el público de los Estados Unidos y del mundo reconoce la nueva generación de músicos cubanos”.
Nachito Herrera pasará el fin de año en Estados Unidos pero en febrero volverá a Cuba, para grabar en los estudios Abdala un disco de esa maravillosa fusión que crearon entre Habana Jazz Social Club y la Orquesta Sinfónica Nacional.
