Cuba repudió este miércoles el “sesgado y engañoso” plan de paz anunciado por el presidente estadounidense Donald Trump para Oriente Medio, por considerar que cimenta la posición de Israel en los territorios disputados y quebranta los derechos de los palestinos.
“Repudio sesgado y engañoso plan de paz de EE.UU. que consagra la ocupación israelí y conculca el derecho inalienable de los palestinos a tener su propio Estado en las fronteras anteriores a 1967, con Jerusalén Oriental como capital y al retorno de los refugiados”, escribió en Twitter el canciller cubano Bruno Rodríguez.
Repudio sesgado y engañoso plan de paz de #EEUU que consagra la ocupación israelí y conculca el derecho inalienable de los #palestinos a tener su propio Estado en las fronteras anteriores a 1967, con Jerusalén Oriental como capital y al retorno de los refugiados. pic.twitter.com/R0ozmt3UG7
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) January 29, 2020
Horas antes y también en su cuenta de la red social, Rodríguez reiteró las críticas al Gobierno de Estados Unidos por su afán “de dominio imperialista”, su manera de tratar a Latinoamérica y el Caribe como una “región subalterna”, al tiempo que condenó la “agresividad” de Washington contra Cuba.
La Isla, que atraviesa un momento tenso en las relaciones con EE.UU., se alinea con la causa de Palestina desde que estableciera relaciones con la nación árabe hace varias décadas.
La Habana defiende una solución “pacífica y duradera” al conflicto palestino-israelí sobre la base de la creación de dos Estados diferentes y la total soberanía de Palestina.
Cuba expresa “enérgica condena” a que EEUU reconozca el Golán como territorio de Israel
La propuesta anunciada por Trump respalda la anexión por parte de Israel del Valle del Jordán, además de asentamientos en Cisjordania, y plantea una soberanía limitada de un hipotético Estado de Palestina.
El plan propone un Estado palestino fragmentado con asentamientos israelíes en su interior conectados con el Estado israelí a través de corredores que parten el territorio, que queda aislado del exterior excepto en la frontera de la franja de Gaza con Egipto.
Inicialmente Trump indicó que Jerusalén seguiría siendo la “capital íntegra” de Israel, pero posteriormente señaló que los palestinos podrían instalar la suya en la zona oriental de esa ciudad, ocupada por Israel en 1967 y anexionada en 1980.