Cuatro años casi ininterrumpidos tiene la peña del trovador cubano Ray Fernández en el Piano-Bar “Tun-Tun” de la Casa de la Música de Miramar, todos los jueves a las cinco de la tarde.
Hasta allá nos fuimos esta semana y encontramos un sabroso ajiaco de gente linda que parece disfrutar como nada, del desenfado que Ray le ha impregnado a este espacio.
Temas de su autoría como La yuca, Matarife, El gerente y Paciencia son tarareados por el público al que este trovador complace con los más versátiles ritmos que a alguien se le puede ocurrir pedir.
A la salida del Diablo, conversamos unos minutos con Ray.
“A la peña no se le tenía mucha fe al principio porque la trova no vende en un cabaret. Pero a tanta insistencia, me dieron un mes de prueba. El primer día vinieron muy pocas personas, el segundo jueves vinieron entre 40 y 50, y de ahí en adelante todo fue loma abajo. Empezó a llenarse hasta como lo estás viendo hoy”.
“Hago mucha sopa, sopa inteligente, mezclando la trova con lo que se le ocurra a la gente. Hacer un espacio a guitarra nada más suele ser aburrido y por eso incorporamos un bajo, una trompeta y la percusión para darle más sabor al asunto. Vamos desde Los Bukis pasando por Marco Antonio Solís y terminando en Shakira o Michael Jackson, por ejemplo”.
“La peña tiene una particularidad. La gente viene a escucharme a mí y a escuchar a los demás que quieran subir al escenario. No le hago audiciones a nadie, aquí el que viene con una guitarra y quiere cantar yo le digo súbete canta una y si el publico te buchea te bajas y si te aplaude, cantas otra”.
Por nuestra parte, solo nos queda invitarles a visitar el Tun-Tun, allá intentaremos estar de nuevo, disfrutando con Ray Fernández.