Naciones Unidas mandó a Cuba al hombre que coordina los esfuerzos internacionales contra el virus que ha matado a miles en África Occidental. David Nabarro, el enviado especial para el Ébola del Secretario General de la ONU Ban Ki Moon, viajó hasta la Isla para participar en la Cumbre Extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) sobre la enfermedad.
El encuentro de alto nivel reúne a presidentes, primeros ministros y representantes de la alianza regional que agrupa a una parte de los gobiernos de izquierda de América Latina y el Caribe.
“Gracias al pueblo de Cuba por enviar algunos de sus mejores doctores, enfermeros y otros trabajadores para respaldar la lucha contra el Ébola en África Occidental. Su contribución es extraordinaria”, declaró Nabarro al llegar a La Habana.
El alto funcionario de la ONU exaltó el ejemplo de la Isla por su “apoyo de primera clase”, así como la disposición de sus autoridades de colaborar ilimitadamente con los otros actores en el terreno. “Es mi deseo que otras naciones sean capaces de brindar un apoyo similar. Es gratificante saber que su gobierno ha aceptado trabajar no solamente para ayudar a los gobiernos (africanos) sino en colaboración con otros participantes en la región”, expresó.
La activa y rápida participación de Cuba en la campaña internacional contra la epidemia de Ébola le valió reconocimiento internacional, incluso desde Washington.
El secretario de Estado John Kerry mencionó el gesto del gobierno de Raúl Castro en el enfrentamiento contra el virus. “Cuba, un país de apenas 11 millones de habitantes ha enviado 165 profesionales de la salud y está planeando enviar otros 300,” recordó el jefe de la diplomacia estadounidense en un encuentro con el personal diplomático de su país.
Cuba no tendría problemas en establecer una cooperación con Estados Unidos en la detención del Ébola. El ex presidente cubano Fidel Castro expresó en un artículo la disposición de la Isla para colaborar con los profesionales estadounidenses que se encuentran en los países africanos.
La administración del presidente Barack Obama recién fortaleció su estrategia gubernamental contra el virus, con el nombramiento de Ron Klain encargado de supervisar a la respuesta norteamericana a la expansión de la epidemia.