Serbia mostró públicamente el sábado un sistema de misiles antiaéreos chino entregado recientemente, hecho que generó preocupaciones en Occidente y entre algunos de sus vecinos.
El sofisticado sistema tierra-aire HQ-22 fue entregado el mes pasado por una docena de aviones de transporte Y-20 de la Fuerza Aérea China. Aunque Serbia busca a membresía en la Unión Europea, se ha estado armando principalmente con armas rusas y chinas, incluidos tanques de batalla T-72, aviones de combate MiG-29, helicópteros de ataque Mi-35 y drones.
En 2020, los funcionarios estadounidenses advirtieron a Belgrado que no comprara sistemas de misiles HQ-22, cuya versión de exportación se conoce como FK-3. Dijeron que si Serbia quiere unirse a la UE y otras alianzas occidentales, debe alinear su equipo militar con los estándares occidentales.
El sistema de misiles chinos ha sido comparado con los sistemas de misiles tierra-aire American Patriot y Russian S-300, aunque tienen un alcance más corto que los S-300 más avanzados.
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, dijo al final de la exhibición de armas en un aeropuerto militar cerca de Belgrado que los misiles chinos, así como otros equipos militares entregados recientemente, no son una amenaza para nadie y solo representan un “poderoso elemento de disuasión” contra posibles atacantes.
Serbia, que estuvo en guerra con sus vecinos en la década de los 90, no reconoce la independencia de Kosovo, declarada en 2008. Todavía tiene relaciones frías con los miembros de la OTAN, Croacia y Montenegro, así como con Bosnia.
Vucic dijo que Serbia también está negociando la compra de aviones franceses Dessault Rafale, así como cazas británicos Eurofighter Typhoon. Dijo que solo los “obstáculos políticos” podrían impedir la compra del avión occidental.
Existe la preocupación de que Rusia podría empujar a su aliada Serbia a un conflicto armado con sus vecinos para tratar, al menos en parte, de desviar la atención pública de la guerra en Ucrania.
Aunque Serbia ha votado a favor de las resoluciones de la ONU que condenan los sangrientos ataques rusos en Ucrania, se ha negado a sumarse a las sanciones internacionales contra sus aliados en Moscú o criticar abiertamente las atrocidades cometidas por las tropas rusas en Ucrania.
Associated Press/OnCuba.