El expresidente Donald Trump entró bajo custodia a la corte federal de Miami para responder por cargos federales.
Los agentes del Servicio Secreto lo escoltaron a su comparecencia ante el tribunal.
Se espera que el juez federal Jonathan Goodman lo deje en libertad y que se le imponga una fianza.
También que Trump se declare inocente de los 37 cargos presentados contra él en una acusación del fiscal especial Jack Smith.
Los fiscales lo han acusado de violar la Ley de Espionaje 31 veces al retener ilegalmente documentos confidenciales de seguridad nacional en su mansión de Mar-a-Lago cuando dejó la presidencia en enero de 2021, y de negarse a devolverlos a los Archivos Nacionales.
Según la acusación, también conspiró para obstruir la justicia, mintió a las fuerzas del orden y violó tres estatutos diferentes relacionados con la retención y el ocultamiento de registros gubernamentales.
Este es el segundo caso penal contra Trump. En abril, la oficina del fiscal de distrito de Manhattan presentó una acusación de 34 cargos en su contra alegando que falsificó ilegalmente registros comerciales con pagos a Stormy Daniels antes de las elecciones de 2016.
El fiscal especial Jack Smith asistió a la lectura de cargos, lo que marca la primera vez que los dos se encuentran cara a cara desde su nombramiento para investigar el manejo de documentos clasificados por parte del expresidente.
En noviembre Smith fue designado por el jefe del Departamento de Justicia, Merrick Garland, para dirigir la investigación sobre de documentos y sobre los esfuerzos de Trump y sus aliados para subvertir los resultados de las elecciones presidenciales de 2020.
“Ciertamente nos declararemos inocentes”, le dijo al juez el abogado de Trump, Todd Blanche. Durante la audiencia, Trump se sentó encorvado con los brazos cruzados y el ceño fruncido. No habló.
El Departamento de Justicia recomendó que Trump y el co-acusado Walt Nauta sean puestos en libertad sin condiciones económicas ni especiales.
El fiscal David Harbach le dijo al juez: “El Gobierno no considera que ninguno de los acusados tenga riesgo de fuga”.
La audiencia terminó en unos 45 minutos.