La joven pintora cubana Gabriela Pez llegó con su muestra a La Cité Internationale des Arts, un acercamiento a la identidad legada por los esclavos africanos y un desafío a los estereotipos occidentales de belleza, reporta Prensa Latina.
Con sus 11 obras, la artista responde a su inquietud interior de defender y resaltar la herencia africana. Pez reveló al medio que este Open Studio es el resultado de seis meses de trabajo en París, con la residencia de artes visuales emitida por la Fundación Bernard Grau de la Academia de Bellas Artes de Francia para artistas cubanos.
Para las obras que ahora expone, la creadora recurrió a la acuarela con la utilización de papel industrial teñido con café, aunque habitualmente utiliza papel orgánico, “que siempre es un reto en cuanto al tamaño, pero aquí incursioné en obras más grandes, por lo que aproveché el papel industrial, teñido con café para buscar matices”
La conexión con el tema llegó a través de la obra de la escritora guadalupeña Maryse Condé, una reconocida activista y promotora de la historia y la cultura de la madre África, confesó a Prensa Latina. Según refiere, Condé aborda cuestiones como la esclavitud, el papel de la mujer frente al flagelo, los traumas de la herencia del colonialismo y el problema del racismo.
Ella le sirvió de fuente de inspiración, dice, así como los mitos yorubas y las historias de esclavos.