En momentos en que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, exhorta al país a reanudar sus actividades económicas, su propio lugar de trabajo, la Casa Blanca, ha sido contaminado por el coronavirus, lo que evidencia sus dificultades para convencer a una nación agobiada por la enfermedad.
Se han detectado dos casos de la Covid-19 en uno de los lugares más protegidos de Estados Unidos, por lo que tres de los máximos expertos en medicina del país han tenido que colocarse en cuarentena y el vicepresidente en autoaislamiento. Y ello ocurre justo en momentos en que la Casa Blanca trata de convencer a la ciudadanía de que está tomando las medidas necesarias para resguardar su salud y que por lo tanto deben reanudar sus actividades normales.
“Esta semana la Casa Blanca enfatizará las medidas de precaución y el sentido de confianza entre la ciudadanía”, tuiteó Alyssa Farah, directora de comunicaciones estratégicas de la Casa Blanca.
“El gobierno de Trump está trabajando las 24 horas del día para aumentar las pruebas, afianzar las existencias de equipos protectores, distribuir terapias y entregar dinero a los estados para que puedan REABRIR de una manera en que todos los ciudadanos podamos tener CONFIANZA”, añadió.
Pero ese mensaje parecía quedar refutado por la situación a lo interno de la misma Casa Blanca.
Pence presidió este lunes la conferencia telefónica semanal con gobernadores, pero desde un salón aparte debido a que su secretaria de prensa dio positivo al virus el viernes. La doctora Deborah Birx y otros funcionarios participaron normalmente desde un salón de conferencias en la Sala de Manejo de Emergencias de la Casa Blanca “debido a las circunstancias un tanto distintas”, explicó el mismo Pence.
“Estamos tomando las medidas necesarias para proteger la salud del presidente”, añadió Pence, según una grabación obtenida por la AP. La Casa Blanca estaba haciendo preparativos para someter a pruebas al personal todos los días.
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Al mismo tiempo, el doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, el doctor Robert Redfield, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, y el director de la Administración de Alimentos y Medicamentos, el doctor Stephen Hahn, estaban todos en cuarentena tras haber sido expuestos a la colaboradora de Pence.
Los tres funcionarios tienen programado comparecer el martes ante una comisión del Senado aunque, al igual que el presidente de la comisión, el senador Lamar Alexander, tendrán que hacerlo por vía remota. Alexander también está en cuarentena porque un miembro de su equipo dio positivo a la Covid-19.
Entretanto, los estados están buscando maneras de relajar las restricciones económicas aplicadas para evitar la propagación del virus.
El lunes Trump se quejó en Twitter que los gobernadores demócratas se están tardando demasiado para levantar las restricciones en sus estados.
Con esta noticia tiene Irma Shelton para deleitarse esta noche, goooooza Zaragoooooza, que provechosa es la transparencia y la libre expresion del gobierno de los Estados Unidos, mientras los matusalenicos mandamaces cubanos yacen “escondiditos” sin asomarse ni en twiter siquiera, solo los “cargabates” del equipo, o sea Canel y Marrero dan parte d ela cara proyectando su voz escondidos tras un “nasobuco azul” de esos que fabrican en Gringolandia y que son para uso exclusivo de los nuevos ricos de “Cagonia”. Somos continuidad, Trump2020.
Lástima que no le suenen un buen estornudo contaminado a tu ilustre presidente, pero de esos que le despelucen su cabello teñido para ver si salimos de él en este mismo 2020