Las autoridades de Japón anunciaron este viernes que han detectado por primera vez varios casos de la nueva cepa de coronavirus que portaban viajeros que llegaron al país procedentes del Reino Unido. Mientras, EE.UU. anunció que exigirá a todos los viajeros que lleguen de territorio británico a partir del próximo lunes la presentación de una prueba de PCR negativa realizada como máximo 72 horas antes del viaje.
La información sobre la detección de la nueva cepa en Japón fue proporcionada por el ministro de Salud, Norihisa Tamura, quien dijo que los casos fueron localizados al ser revisados pasajeros en dos aeropuertos nipones entre el 18 y el 21 de diciembre, y añadió que los cinco afectados han quedado aislados, reporta la agencia española EFE.
Tamura señaló en una rueda de prensa que dos de los casos aparecieron en los análisis que hicieron a pasajeros en el aeropuerto de Haneda, en Tokio, el 21 de diciembre, y los otros tres en el de Kansai, en la prefectura de Osaka, el 18 de este mes.
Los cinco pasajeros dieron positivo de COVID-19 al llegar a Japón, y en los análisis posteriores se confirmó que eran portadores de la nueva cepa. Cuatro de ellos no presentaban síntomas.
El ministro no proporcionó la identidad ni la nacionalidad de los contagiados con la nueva variante de coronavirus, aparentemente mucho más contagiosa que la que surgió a finales del año pasado en la ciudad china de Wuhan. Los casos se detectaron al analizar las pruebas de 68 personas con resultado positivo en los análisis realizados en laboratorios del país entre el 12 y el 22 de diciembre.
La nueva cepa ‘británica’ del COVID-19 también fue encontrada en ocho países de Europa, de acuerdo con el director regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge.
Kluge añadió que la variante también parece estar extendiéndose entre los más jóvenes, a diferencia de las cepas anteriores, y es necesario continuar reforzando las medidas de restricción mientras se estudia esa mutación, según declaraciones citadas por Sputnik News.
Japón prohibió desde el jueves la llegada al país de ciudadanos extranjeros procedentes del Reino Unido, pero esa prohibición no afecta a los japoneses que han estado en ese país ni a los extranjeros residentes en Japón. Según se anunció hoy, esa misma restricción se aplicará desde este sábado a Sudáfrica, donde también ha sido detectada una nueva cepa.
De acuerdo con el último cómputo oficial, en Japón se han contagiado con el coronavirus unas 215.000 personas, con 3.197 fallecidos.
EEUU: pruebas negativas a los viajeros del Reino Unido
La medida fue anunciada este jueves por los gubernamentales Centros de Control y Enfermedades (CDC) y su objetivo es intentar contener la nueva cepa del coronavirus, detectada en el país europeo y que parece ser un 70 % más contagiosa que otras variables, de acuerdo con un comunicado oficial.
Bajo la nueva normativa, todos los pasajeros que salgan de Reino Unido (sean o no ciudadanos estadounidenses) deberán entregar a las aerolíneas un documento que pruebe que, en las 72 horas, han dado negativo en un test para detectar el virus, ya sea una PCR o una prueba de antígenos. Si los viajeros no tienen ese documento, las aerolíneas les negaran la posibilidad de embarcar.
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La aerolínea estadounidense Delta ya había comenzado ayer jueves a pedir a sus pasajeros un test negativo antes de embarcar; y United Airlines había anunciado que haría lo mismo a partir de lunes.
No obstante, esta nueva medida afectará a un número relativamente pequeño de viajeros porque, en marzo, el presidente estadounidense, Donald Trump, ya restringió la entrada de extranjeros procedentes de Reino Unido, lo que redujo el tráfico aéreo entre ambos países en un 90%, de acuerdo a los CDC.
La nueva cepa del coronavirus ha provocado el confinamiento en el Reino Unido de más de 20 millones de personas. Además, tras su descubrimiento numerosos países de Europa, Asia, Latinoamérica y Oriente Medio han decidido suspender en los últimos días las conexiones aéreas con la nación británica.
EFE / OnCuba