El gobierno de Donald Trump “ha cruzado la línea roja de la decencia”, aseguró Johana Tablada, subdirectora general de Estados Unidos de la Cancillería de la Isla, quien dijo este miércoles que Washington lleva adelante una campaña contra la colaboración médica cubana con el respaldo de la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Jamás un gobierno estadounidense osó involucrarse en acciones de violencia contra el personal cubano de la salud, como sucedió recientemente en Bolivia” tras la renuncia del presidente Evo Morales –al que La Habana considera víctima de una golpe de Estado–, declaró a la prensa Tablada acompañada de funcionarios del Ministerio de Salud Pública (Minsap), durante un evento sobre el tema Cuba en la política exterior de EE.UU.
La diplomática se refirió a un panel organizado este miércoles por Luis Almagro, Secretario General de la OEA, “para agredir la cooperación internacional de Cuba y a los pueblos que se benefician de ella” como parte de una campaña de la administración Trump a la que “es necesario denunciar por su mala intención”.
“Almagro –a quien Tablada calificó como un ‘peón’ de Estados Unidos– miente e ignora la verdadera naturaleza de esa noble actividad de los profesionales de la salud cubanos”, dijo, al tiempo que defendió las misiones médicas de la Isla en más de 60 naciones como un “ejemplo irrefutable de solidaridad”, que ha sido reconocida por los países beneficiados, por organizaciones internacionales como la ONU y la OMS e, incluso, por congresistas y políticos estadounidenses.
Tablada afirmó que, contrario a lo que aseguran “vilmente” Almagro y el gobierno de EE.UU., los profesionales de la salud de Cuba en otras naciones “no intervienen en los asuntos internos de esos estados” y “se educan para no preguntarle a nadie a qué partido pertenece ni a qué ideología responde”.
Atacar a los médicos cubanos, dijo, foma parte de un “glosario de falsedades que lo único que hace es desacretidar a quien las dice”.
En su opinión se trata de una campaña “fracasada” que “no tiene credibilidad fuera de los gobiernos serviles” a Washington y que busca distraer la atención de los propios problemas internos de Estados Unidos, como el proceso de juicio político al presidente Trump.
“Detrás de todo ello hay un diseño para demonizar a Cuba y tratar de erosionar el prestigio de Cuba en los temas en que más reconocimiento internacional tiene por mérito propio, y para atacar la economía cubana y los ingresos que genera la colaboración médica que sustentan los costosísimos servicios de salud cubanos que benificia a los niños, los ancianos y todos los cubanos en general, en medio del bloqueo y las medidas leoninas contra Cuba que EE.UU. acumula semana tras semana”, aseveró.
Por su parte, el doctor Jorge Delgado, director de la Unidad Central de Cooperación Médica del Minsap, afirmó que los profesionales de la salud cubanos “cumplen sus misiones de forma voluntaria y humanista, basados en el internacionalismo y la solidaridad”, y descalificó el término de “esclavos” dado a los colaboradores por el gobierno de Trump.
“Decir que los médicos son esclavos y que quienes trabajamos en la colaboración médica estamos favoreciendo la trata de personas es una tamaña mentira”, aseguró.
“¿Cuándo unos ‘esclavos’ han salvado más de 6 millones de vidas? ¿Cuándo han sido solicitados por organizaciones como la ONU y la OMS para combatir la muerte durante la epidemia del ébola en África?”, se preguntó.
Su postura fue apoyada por el doctor José Luis Aparicio, director de postgrado del Minsap y quien, como Delgado, ha cumplido varias misiones fuera de la Isla.
Aparicio resaltó que los profesionales cubanos no solo brindan atención especializada de salud y realizan acciones de vigilancia clínica y epidemiológica, sino también de formación de recursos humanos y de investigación científica en los países en los que están destinados.
“Si de algo somos esclavos es del sagrado cumplimiento de nuestro deber de salvar vidas y cuidar la salud de las personas”, dijo, al tiempo que reiteró la disposición del Minsap de seguir adelante con su programa de cooperación internacional y no amedrentarse ante “provocaciones estériles”.
Delgado, por su parte, reconoció que el fin de varias misiones de salud cubanas en países como Brasil, Ecuador y Bolivia puede significar alguna afectación para Cuba, pero, dijo, “la dignidad está por encima de los beneficios económicos que puedan recibirse por estos servicios”.
“La afectación que pueda existir por la suspensión de algunas misiones la vamos a suplir, nos sabremos reponer sin detener la solidaridad”, dijo Delgado, quien aseguró que se ha incrementado el número de países que desea la colaboración médica cubana.
Según cifras divulgadas por los representantes del Minsap, más de 500 mil profesionales de la salud han participado en misiones cubanas fuera de la Isla desde 1963, incluyendo las brindadas tras huracanes, terremotos y el enfrentamiento al ébola en África. Durante ese tiempo, han atendido más de 1.800 millones de personas.
Actualmente, Cuba mantiene alrededor de 30 mil colaboradores en 65 países.
Dice la “señora” Tablada que lo de los medicos cubanos es una “cooperacion “…de cooperacion NADA señora …es un NEGOCIO…es MATEMATICA de bodega…un doctor cubano gana en una de esas llamadas misiones en 2 años lo que le costarian 20 años para ganar en Cuba…cualquier doctor que le ofrescan una mision asi de ganar en 2 años lo que ganaria en 20 años aceptaria……imagiese Ud un Doctor americano que gana 120 mil al año gamaria 2 milloes y medio de dolares en solo 2 años….El gobierno cubano encima se queda con el 75 % de lo que se paga por el servicio del medico…Por que no permiten que los medicos sean contratados independientes del estado y que ganen los 4 mil dolares que pagan por sus servicios????? Mafiosos es lo que son en el Gobierno Cubano !!!
Trataban a los médicos como esclavos y ahora el indecente es Trump…
increible que hacen con nuestros medicos