El gobierno de EE.UU. “espera no alcanzar el mínimo de 20 mil visas de inmigrante anuales para cubanos”, de acuerdo con el Nuevo Herald, que cita un informe del Departamento de Estado.
El informe citado, que hace un balance semestral destinado al Congreso, muestra que hasta finales de julio de 2018 solo se emitieron 3,195 visas, “lo que hace muy poco probable” que en el actual año fiscal el gobierno de Donald Trump se acerque a la meta de las 20 mil visas, “lo establecido en los acuerdos migratorios de los dos países”, recuerda la publicación.
Esto se une al hecho de que desde comienzos del año fiscal, el 1 de octubre del 2017, hasta el pasado 3 de agosto del 2018, funcionarios consulares estadounidenses emitieron 134 documentos de reunificación familiar, “aunque Estados Unidos tenía más de 20 mil solicitudes pendientes”, según el Nuevo Herald.
Aún así, el informe asegura que el Departamento de Estado y el Servicio de Inmigración y Ciudadanía “están estudiando opciones” para que el programa de reunificación familiar continúe.
En cuanto las solicitudes del estatus de refugiado por cubanos, explica que desde el comienzo del año fiscal no se han aceptado solicitudes ni procesado las ya presentadas, al menos en el semestre resumido.
Ya a inicios de 2018, el propio Herald había adelantado que el gobierno estadounidense podría incumplir la cuota de visas para cubanos, citando a una vocera del Departamento de Estado, la que, no obstante, dijo entonces que EE.UU. mantenía su compromiso “de apoyar una migración segura, ordenada y legal”.
Meses después, la realidad confirma aquella predicción, según el informe citado reconoce.
Los supuestos ataques sufridos por una veintena de diplomáticos de EE.UU. en La Habana, cuya veracidad es cuestionada por el gobierno cubano, provocaron el retiro de aproximadamente dos terceras partes de los funcionarios estadounidenses en la capital de la Isla, con la consecuente paralización de la mayoría de los trámites consulares.
“Casi todo el procesamiento de visas en La Habana está suspendido”, confirma el Departamento de Estado, que además asegura que el procesamiento de visas de inmigrante para los cubanos en embajadas fuera de la Isla se maneja “a una capacidad mucho más reducida”.
Lo anterior hace referencia a la mudanza primero a Bogotá, Colombia, y luego a Georgetown, Guyana, de la emisión de visas a migrantes cubanos, mientras las visas para visitar Estados Unidos también deben solicitarse en oficinas consulares estadounidenses fuera de Cuba. Sin embargo, como el mismo Herald hace notar “muchos cubanos no pueden darse el lujo de hacer costosos viajes a Guyana y Colombia para solicitar la visa de inmigrante, especialmente sin seguridad de que se la otorguen”.
Reducción “significativa” de migrantes
La drástica disminución en la entrega de visas a cubanos, tiene también como telón de fondo la notable caída de la migración irregual de cubanos EE.UU. tras la emilinación en enero de 2017 de la política de “pies secos, pies mojados”, que permitía a los llegados ilegalmente desde la Isla entrar sin dificultades a territorio estadounidense y solicitar la residencia permanente después de un año y un día.
Ahora, sin embargo, los cubanos que intentan entrar a EE.UU. sin visa corren el riesgo de ser deportados, “lo que los coloca en la misma situación de inmigrantes potenciales de otros países”, explica el Nuevo Herald, que también recuerda que “el Servicio Guardacostas de Estados Unidos y los guardafronteras cubanos cooperan rutinariamente en asuntos de inmigración marítima”.
La publicación fija en 5,651 el número de cubanos interceptados por fuerzas estadounidenses en el mar en el año fiscal 2016, y en 1,606 los de 2017. Pero hasta el 14 de agosto de este año fiscal, la cifra era de apenas 200. Cuba, por su parte, ha reportado 27 casos, según el informe del Departamento de Estados.
La cantidad de cubanos que tratan de llegar a EE.UU. por tierra a través de la frontera con México, también “ha bajado significativamente” este año fiscal. En el período anterior Aduanas y Protección Fronteriza tuvo 15,557 “interacciones con ciudadanos cubanos”, número que había descendido a 5,465 hasta el 21 de agosto de este año.
En cuanto a las deportaciones hacia la Isla establecidas en los acuerdos migratorios entre ambos países, el informe dice que de 2,746 cubanos que abandonaron la Isla durante el éxodo del Mariel y que EE.UU. declaró inelegibles para permanecer en el país por diferentes razones, ya ha sido deportados 2,034 mientras 254 han fallecido. Hasta agosto de este año fiscal, fueron devueltos cinco cubanos de esa lista.
Además, según el informe, hay otros 37 mil cubanos con órdenes definitivas de deportación, muchos de ellos delincuentes convictos que han cumplido sus condenas por delitos cometidos en EE.UU. El gobierno estadounidense ha presentado “en años recientes” a La Habana 2 mil casos de cubanos que desea deportar y, según el informe, en diciembre de 2017, Cuba aceptó la repatriación de 10.
También hasta el 8 de agosto la Policía de Inmigración y Aduanas (ICE) ha presentado los casos de 687 cubanos que desea deportar porque intentaron entrar a EE.UU. después del 12 de enero de 2017, siguiendo las pautas de la declaración conjunta emitida entonces. Pero, de acuerdo con el informe, La Habana ha negado la entrada de 362 de ellos debido a las diferencias en la interpretación de ese acuerdo.
“El Departamento de Estado y el ICE están intentado solucionar esta diferencia en la interpretación”, dice el informe.
Representantes oficiales de Cuba y EE.UU. se reunieron por última vez para abordar las relaciones migratorias en julio del 2018 en Washington. “Ambas partes reconocieron los beneficios de la Declaración Conjunta del 12 de enero de 2017”, según una nota de la cancillería cubana.
Autoridades de ambos países esperan dialogar nuevamente sobre el tema a fines de este año, según el Nuevo Herald.