La historia de los desencuentros entre la Gran Logia de Cuba (GLC) y la Gran Logia de Florida (GLF), en Estados Unidos, comenzó hace 58 años. Desde entonces, aunque ambas han tratado de mantener el espíritu fraternal, han ocurrido varias rupturas de las relaciones. La primera fue en 1961, cuando el Gran Maestro (GM) Juan José Tarajano González y otros grandes funcionarios de la Masonería Cubana, por motivos políticos, pretendieron trasladar la GLC para la Florida. Para ello, contaron con la anuencia del GM de la GLF J. Edwing Larson, quien a partir de ese momento desconoció a la GL radicada en Cuba.
Tras 19 años de ruptura, en abril de 1981 se anunció el restablecimiento de las relaciones fraternales entre ambas instituciones. A lo largo de los años, los masones cubanos en los Estados Unidos aumentaron numéricamente y crearon diferentes organizaciones, entre ellas la Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M. (en el Exterior), la Federación de Masones Cubanos Exiliados “Cuba Primero”, la Gran Logia Unida de las Antillas, la Gran Logia Latinoamericana, el Grupo de Apoyo a los Masones Cubanos (GAMEC), entre otros.
Pero la GLF no acepta ni reconoce a las asociaciones masónicas de cubanos en esa región, porque considera que estas violan su jurisdicción como suprema y única autoridad masónica en el territorio del Estado de La Florida.
En 2013, tras un encuentro entre masones cubanos de ambas orillas en busca de propiciar el acercamiento mutuo, la GLC escribió a la GLF para solicitar a la GLF su cooperación en este particular y conocer su disposición para firmar tratados. La respuesta se dio en marzo del año 2014, cuando la GLF, por segunda ocasión, rompió las relaciones con la GLC, alegando que esta interfería e invadía el territorio masónico perteneciente a la Gran Logia floridana.
No fue hasta agosto de 2018, y luego de nuevas conversaciones, que finalmente las dos instituciones restablecieron sus vínculos. Como parte de la nueva alianza, la GLF dio la posibilidad a los masones cubanos que viven en su jurisdicción de, en un plazo de noventa días, visitar sus logias para que, si así lo deseaban, escogieran a cuál afiliarse y, de esta forma, se regularizaran, una iniciativa a la que muchos ya se han acogido.
Como parte de los diálogos entre ambas instituciones, el GM de la GLF, Dr. John E. Karroum, visitó la GLC en La Habana este 23 y 24 de marzo, con lo que se convirtió en el segundo GM que asiste Cuba en los últimos 60 años. El primero fue Dale Goerig, quien viajó a la Isla en enero del 2009, para participar en un homenaje a José Martí en el 150 aniversario de su natalicio.
En el contexto del histórico encuentro, OnCuba conversó con el Dr. Karroum y su homólogo de la GLC, Ernesto Zamora, sobre las perspectivas masónicas y sociales para ambas instituciones y países.
¿Qué factores propiciaron este nuevo acercamiento?
GM John E. Karroum: Cada Gran Logia tiene la jurisdicción en el lugar en que se encuentra. La GLC tiene jurisdicción solo en Cuba, la GLF tiene jurisdicción solo en Florida, y posee, además, la supremacía sobre todos los masones de nuestro Estado. En un punto, la GLC reconoció a masones cubanos en Miami, lo cual no podía ser. A estas logias nosotros las llamamos clandestinas y son básicamente un problema entre nosotros. Pero en abril, el GM Zamora nos confirmó que la GLC no reconocía a los masones irregulares de allá. Esto ha permitido que se restablezcan las relaciones de mutuo reconocimiento.
GM Ernesto Zamora: Como parte de nuestro juramento, nosotros no podemos reconocer a masones clandestinos o logias irregulares. No obstante, sabemos que entre los cubanos que viajan a Estados Unidos, por determinadas razones económicas, sociales y políticas, hay masones que ha querido mantener las raíces en estas logias, que no son regulares porque están trabajando bajo un territorio donde existe una logia legal reconocida.
En el tratado de mutuo respeto que tienen las Grandes Logias, cuando existe una logia establecida con todos los requisitos y llega otra logia a ese lugar, es una invasión de territorio; por tanto, no se puede reconocer a ese grupo de logias que invaden un territorio. Simplemente nosotros, haciendo uso de lo que está establecido en nuestro juramento, en nuestras leyes masónicas y las leyes que se han firmado internacionalmente, restablecimos las relaciones. Esto fue espontáneo. Hasta ahora este hecho había sido malentendido, malinterpretado, o mal aplicado; y nosotros lo analizamos, no por querer ningún protagonismo, sino simplemente para aplicar lo establecido por nuestras leyes.
¿Qué beneficios pudiera traer para ambas potencias esta relación?
GM John E. Karroum: Los beneficios son esencialmente fraternales. Cuando dos logias se reconocen mutuamente, entonces los miembros pueden visitase entre sí y a sus respectivas instituciones; así como visitar otras Logias o Grandes Logias de terceros países que tienen amistad con las Grandes Logias que establecieron relaciones de amistad
¿Cómo ha sido el proceso para la incorporación de los masones cubanos en Florida a la GLF?
GM John E. Karroum: Todavía estamos en ese proceso, pero sí, ya se han afiliado varios cubanos. Nosotros tenemos cinco logias que trabajan en español, y a ellas pertenecen no solo cubanos, sino hombres de habla hispana de diferentes países.
Además, hemos creado una logia llamada Perseverancia UDI (Under Dispensation), que trabaja bajo el permiso del GM solamente, aunque no es todavía oficial. En ella hay un promedio de 200 miembros, dentro de los cuales se hallan unos 95 cubanos que se han ido regularizando a través de este sistema. En la membresía del resto de las logias de habla hispana se encuentran cubanos también. Y creemos que esta sea la solución definitiva a la problemática de la existencia de logias clandestinas o irregulares de cubanos en Florida. La manera en que esta solución funcione dependerá de los masones cubanos allá.
GM Ernesto Zamora: Creemos que la oportunidad que les ha dado la GLF a los masones cubanos irregulares es la mejor solución. La Masonería es universal, no importa el idioma que se hable en los diferentes países, nosotros hablamos el mismo idioma fraternal. Ahora sí, todos tenemos que respetarnos y ajustarnos a las condiciones establecidas en cada territorio.
¿Mantienen algún diálogo con las organizaciones masónicas de cubanos en La Florida?
Sí, pero, como te dije, todo depende de ellos. Mire, yo vengo de una logia en el Medio Oriente, en Siria, pero cuando vine a Estados Unidos empecé a ir a una logia en lugar donde vivo. Todos los masones hacen igual. Si cambian de país o de ciudad, pueden afiliarse a una logia de ese lugar. Las puertas están abiertas.
Tengo entendido que la delegación de la GLF ha sido invitada a la sesión de la Alta Cámara de la GLC, y que, además, han estado debatiendo sobre la firma de un acuerdo entre ambas potencias masónicas.
GM Ernesto Zamora: Aún no hemos llegado a firmar el tratado porque ambos coincidimos en que debemos analizar mejor las condiciones del acuerdo. Cuando esto se haga, de ambas partes, iremos nosotros a los Estados Unidos a firmarlo finalmente. Ya lo más importante está, que es el restablecimiento de las relaciones entre ambas potencias. El acuerdo es algo simbólico, que afianza aún más nuestros vínculos.
¿Cómo se ha desarrollado el encuentro de este fin de semana?
GM Ernesto Zamora: Principalmente lo que hemos hecho es confraternizar, porque los principales aspectos de la nueva alianza ya han sido tratados. Entonces lo que hemos buscado ahora es conocernos mutuamente, dialogar in situ, que ellos conozcan la realidad de la masonería cubana, de la GLC, y las perspectivas que existen para las dos instituciones.
La reconciliación entre ambas potencias marca un nuevo período en la historia masónica de ambos países. ¿Cómo pudiese repercutir este hecho en las relaciones políticas, que no viven hoy su mejor momento?
GM John E. Karroum: En la Masonería, en todas las logias del mundo, no se debe discutir de política. Si usted estudia la guerra civil en los Estados Unidos verá que había dos partes masónicas, una que apoyaba al norte y otra que apoyaba al sur, pero no eran enemigas, porque no hablaban de política. Muchas veces la gente no entiende eso.
Fuera de la Masonería se puede ver, por ejemplo, a dos hermanos de una misma familia que cada uno apoya un partido político diferente y ya por eso son enemigos. Pero en la Masonería no ocurre así. Nuestros preceptos nos unen y son mucho más fuertes que aquellos elementos que nos separan. Además, un masón debe respetar las leyes civiles del país donde vive. Eso es muy importante para nosotros también.
GM Ernesto Zamora: La Masonería tiene sus preceptos y sus caminos a seguir, basados en el mejoramiento humano fundamentalmente. Que los hombres que la componen piensen de diferentes maneras, no tiene nada que ver.
No hablamos de política porque consideramos que es un factor que divide a las personas. La nuestra es una institución que busca unir, que busca la paz, la hermandad, y la política lo que hace es dividir. Si dejamos que entre en nuestra institución, entonces perdemos el sentido. No obstante, también promovemos la libertad de pensamiento y la tolerancia, que son dos de los valores que nos definen.
Por lo anterior, no creemos que el encuentro entre nuestras Grandes Logias incida en las relaciones políticas entre Cuba y los Estados Unidos, ni en un sentido ni en otro. Desde el punto de vista masónico, aunque se han manifestado algunas discrepancias, hemos tenido muy buenas relaciones con el resto de las Grandes Logias de Estados Unidos, y trabajaremos para que así se mantenga.
Entre los objetivos de la Masonería esta el acercar los criterios de los seres humanos, respetar la diversidad de los mismos y trabajar de común acuerdo por el bien mayor, ELEVAR A TODA LA HUMANIDAD A UN ESTADIO ÉTICO SUPERIOR, no deja de tener razón el titulo de este articulo, la Masonería es una escuela de ciudadanos, bajo las premisas de Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Cuba no es una excepción, la masonería a estado presente en todas las etapas de la Historia cubana, desde su fundación, hasta los días actuales, los grandes hombres que adornan el pabellón de la gloria nacional, todos estuvieron vinculados a la institución desde Céspedes hasta José Martí, eso en cuanto a la independencia, el periodo republicano de 1902 a 1959, no fue una exención, fue realmente uno de los momentos de mayor esplendor de la masonería cubana, la construcción del emblemático edificio de Carlos III y Belascoain, la Universidad Masonica, el Asilo Nacional Masonico, la Biblioteca Masonica, la Revista de la Gran Logia de Cuba, que tuvo incluso alcance internacional, obra de un masón fue la creación de la institución, Hijas dela Acacia, desde cuyo seno se le dio la posibilidad de crecer a la mujer cubana desde su propia óptica y con su propio esfuerzo, sin abandonar jamas a la familia.
Desde el 1959 hasta la fecha las cosas han ido cambiando para la masonria de acorde a la situación del país, los primeros años fueron realmente de desencuentro y sobre vivencia, la capacidad de pensamiento emigro con los masones que se fueron, eso hizo realmente retroceder a la institución, PERO LOGRAMOS SOBREVIVIR, y se lo debemos a muchos hermanos que hoy ya no están entre nosotros, a finales de los 80 y principio de los 90 se comenzó a revertir esa situación, hoy la capacidad de pensamiento se a ido recuperando, los jóvenes se han comenzado a acercar a la institución, lo que a ayudado a acercar a los profesionales a las filas de la masonería que a ido nuevamente ganando el espacio social que le corresponde, la orden a tenido aciertos y desaciertos, pero sigue mirando hacia el futuro del ser humano como premisa fundamental.
Seguirá como organización fraternal trabajando por incrementar y profundizar el amor entre todos los hombres, por elevar las sanas virtudes, la honestidad, la honradez, el respeto a la familia, para que la tolerancia sin sumisiones e imposiciones pase nuevamente a ser la herramienta fundamental para el dialogo sincero y real entre todas las personas, sin tener en cuenta ni filiación política o religiosa, para que SER UN HOMBRE HONESTO EN NUESTRA PATRIA DEJE DE SER UNA MISIÓN SUICIDA.
Finalmente se han aplicado las leyes masónicas para bien de la fraternidad. Nuestro reconocimiento y profundo agradecimiento para el MRGM de la Florida Dr. John E. Karroum, que ocupa su columna en el Oriente Eterno y al MRGM de Cuba Ernesto Zamora.