El Gobierno cubano no cree que Estados Unidos tenga interés en mejorar las relaciones bilaterales y las conversaciones bilaterales están en los mínimos posibles.
Y “por eso ponen excusas en el camino y de una forma para que no podamos mejorar la relación. Hablan de presos, solo hablan de presos en Cuba, no hablan de presos en Estados Unidos. Sería un tema sobre el que pudiéramos tener una conversación recíproca si fuera la voluntad de Estados Unidos. Podríamos hablar de derechos humanos entre los dos países”, dijo el viceministro cubano de Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, a la cadena NBC.
En su opinión, “tenemos serias preocupaciones sobre el respeto a los derechos humanos en Estados Unidos. Es un tema que estamos listos para discutir, pero tiene que ser una conversación integral”, agregó.
El alto funcionario cubano sugirió la necesidad de “una conversación que ponga todo sobre la mesa para solucionar los problemas entre ambos países”, pero “es muy difícil realizar eso mientras Estados Unidos tiene una política de estrangulamiento de la economía cubana”, enfatizó en referencia al embargo de más de 60 años.
Dijo que el Gobierno cubano está dispuesto a mejorar las relaciones bilaterales, pero “sobre la base de una relación mutuamente beneficiosa.”
Y detalló: “Lo difícil es creer que Cuba necesita dar pasos cuando Estados Unidos, contrario a lo que ha proclamado, contrario a lo que fue la promesa oficial de este gobierno cuando llegó al poder, (cuando) fue electo, no ha dado pasos para mejorar la relación con Cuba y está poniendo excusas, una excusa detrás de otra para que se mantenga básicamente la posición que se puso y la política que se puso en marcha por la administración anterior”.