Gracias al crecimiento sostenido en los últimos años en la exportación de servicios, la balanza comercial de Cuba muestra en 2012 signos favorables, según informó al parlamento cubano Oscar Pérez Oliva, viceministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera.
Pérez Oliva informó a los parlamentarios de la comisión de asuntos económicos que hasta el cierre de octubre los sectores de salud y turismo cargaron con el peso fundamental del sector externo, supliendo en gran medida el decrecimiento en las exportaciones de bienes.
Entre las debilidades que en la actualidad inciden en la actividad comercial cubana, el viceministro señaló la alta dependencia a importaciones de productos que presentan precios inestables en la bolsa mundial, y que aun no se logra una adecuada diversificación de las exportaciones y mercados.
Hasta septiembre, el turismo había reportado ingresos cercanos a los 1500 millones de dólares, para un crecimiento de un 7,7 por ciento con respecto a igual periodo del año anterior.
Pérez Oliva achacó a la ineficiencia en los procesos de análisis de mercado y descuidos en la calidad de los productos, la pérdida de espacio en mercados internacionales, lo cual impidió mostrar saldos positivos en la balanza comercial del país. La crisis mundial, sumada a la alta competitividad y exigencias en mercados foráneos, provocó la disminución de estas exportaciones, afirmó.
Aunque decrecieron ligeramente sus exportaciones, los medicamentos genéricos y farmacéuticos, el níquel y el azúcar crudo continúan siendo los principales rubros de la nación caribeña en el exterior.
En 2011 las exportaciones cubanas habían crecido un 31 por ciento con respecto al año anterior, pero el peso fundamental seguía cayendo en los servicios, dado que desde 2009, la presencia de productos cubana en otros mercados muestra una tendencia a la baja.