Natasha Vázquez
Fotos: Duber Piñeiro y Natasha Vázquez
La imagen es muy parecida a la que deben haber visto los habaneros de antaño, pero ya no son tiempos de piratas. En pleno siglo XXI, es un privilegio disfrutar la llegada del Buque Escuela de la Armada Española “Juan Sebastián de Elcano”, que durante 4 días visitó la capital cubana, como parte de su 83 crucero de instrucción.
Con 256 tripulantes a bordo, el buque zarpó de Cádiz el 1 de abril e hizo escala unos días después en Santa Cruz de Tenerife. La Habana es el primer puerto que toca el "Juan Sebastián de Elcano", tras cruzar el Atlántico en 29 días. Una travesía catalogada de "buena y tranquila" según uno de los tripulantes, pero que reconoce que “ya apetecía tocar tierra”.
Por su parte, el comandante del buque escuela, el capitán de navío Alfonso Gómez Fernández de Córdoba, agradeció la hospitalidad de los habaneros en nombre de la dotación del Elcano.
"Estamos felices de poder estar en una ciudad tan bonita y en un país con el que nos unen relaciones tanto históricas como culturales"
“Aquí la colonia española es muy importante y siempre nos acoge con mucho cariño”, apuntaba otro de los marineros.
En el buque escuela viajan en esta ocasión 23 oficiales, 22 suboficiales, 140 militares de tropa y marinería y 5 funcionarios civiles. Además, 69 guardias marinas que realizan parte de su cuarto y penúltimo año de carrera a bordo. Un total de 26 mujeres (un diez por ciento de la dotación del “Juan Sebastián de Elcano”) ocupan diferentes responsabilidades en el barco.
El Juan Sebastián de Elcano debe su nombre al marino español que dio la vuelta al mundo por primera vez en 1522 y es uno de los pocos que cuentan con 4 mástiles y 20 velas. Desde su primer crucero de instrucción en 1928 ha visitado más de 180 puertos de 70 países diferentes.
El buque escuela español, un bergantín-goleta, había recalado antes en Santa Cruz de Tenerife, y tras la visita habanera, se dirige rumbo a Nueva York, donde participará en su Semana Naval y en la regata internacional “Opsail”. Mientras tanto, La Habana los acoge con los brazos abiertos, por novena vez. Los tripulantes del Juan Sebastian de Elcano, pudieron recorrer a ciudad y encontrarse con los habaneros que visitaron el barco y contemplaron admirados un velero que recuerda a los muchos que surcaban un día estas mismas aguas.
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