Más de 30 intelectuales cubanos exigieron este lunes la liberación de los presos por las protestas del 11 de julio, después de conocidas las sentencias “ejemplarizantes” a 127 implicados. El documento busca la atención de los académicos y artistas, “sin dispensas ideológicas”, y los invita a sumarse a la demanda.
“Es un deber intelectual general de académicos y artistas, en cualquier época y sociedad, condenar la violencia y la arbitrariedad sin dobles raseros; sin dispensas ideológicas o subterfugios de realpolitik”, afirman en carta abierta denominada: “Manifiesto contra el silencio, por la justicia”.
El documento está respaldado por reconocidos nombres de las artes y ciencias cubanas, tanto dentro como fuera del país, como Carmelo Mesa-Lago, Pedro Monreal, Fernando Pérez Valdés, Tania Bruguera, Mauricio de Miranda, Alex Fleites, Armando Chaguaceda, Carolina Barrero, Omar Everleny Pérez Villanueva y Sandra Ceballos.
“Las posturas de disimulo, silencio o complacencia (…), en lugar de defender a la ciudadanía vulnerable y hacer rectificar a las autoridades, solo perpetuará y ampliará los abusos y los conflictos. Nos convertirá a cada uno de nosotros, personas de ideas y palabras, en cómplices, conscientes o disimulados, de la violencia y la injusticia”, afirman. La Joven Cuba publicó ayer el Manifiesto.
Los firmantes plantean que tras una excarcelación general se debata cómo delimitar de forma proporcional y apegada al derecho las responsabilidades por la violencia que se registró el 11 de julio, pero con una máxima: “El derecho no puede subordinar a la justicia”. Consideran asimismo que “es un deber humanista” el “acompañar a las víctimas de la violencia de Estado” porque estas protestas fueron “un estallido social expresado mediante la desobediencia civil”.
Dichas protestas se debieron, a juicio de los firmantes, a “la mala gestión gubernamental de la economía” y los “modos autoritarios de gestionar el conflicto y participación socio-políticos en Cuba” ante lo cual “llamamos a nuestros colegas intelectuales y artistas a acompañarnos. Los presos son -o pueden ser- nuestros familiares, vecinos, amigos. Nosotros mismos”.
Los intelectuales denuncian “el uso desmedido de la violencia” por parte del Estado en las manifestaciones, que provocó la muerte de un manifestante, y a la que siguieron “allanamientos de moradas, golpizas a manifestantes” y la “detención de más de 1000 ciudadanos”.
Condenaron además los procesos judiciales “a más de 500 ciudadanos” en los que se han dictado “penas ejemplarizantes” de hasta 30 años, “escarnios públicos” a juicio de estos intelectuales que ven “desproporción en las condenas, vulneraciones en los estándares procesales” y una “exhibición ejemplarizante” de los procesos en los medios oficiales.
https://twitter.com/lajovencuba/status/1505879122073038849
“Esos cubanos y cubanas solo han ejercido su derecho a tener derechos”, por lo que exigen que los implicados en excesos en las manifestaciones “sean ciudadanos o agentes estatales”, sean “procesados de modo proporcional y conforme a derecho, jamás punitivamente”.
También recuerda la carta que, en su mayoría, los jóvenes procesados provienen de barrios vulnerables, afectados por la aguda crisis económica y por la mala gestión gubernamental y subraya que hay desproporción de las condenas, vulneraciones en los estándares procesales vigentes y una exhibición ejemplarizante de los procesos por la prensa estatal nacional.
El documento va siendo respaldado por otra buena cantidad de intelectuales cubanos.
Efe/OnCuba.