La relatividad de las cifras y su forma de presentación pública no nos deben llevar a restar importancia a fenómenos sociales preocupantes y dañinos. Tal es el caso de la interesante información que acaba de ofrecer el Ministerio Interior de Cuba acerca de la baja incidencia de delitos de violencia y abuso sexual contra niñas, niños y adolescentes.
Según la información que publicó este martes la agencia Prensa Latina, durante el 2012 se reportaron en el país dos mil 117 denuncias de delitos contra niños, niñas y adolescentes, lo cual arroja una incidencia de 0,09%, en relación con una población de dos millones 260 mil 751 habitantes de hasta 16 años.
Los datos que ofreció la coronela Idaís Borges, jefa de la Dirección de Menores del Ministerio del Interior (Minint), pudieran corroborar que, efectivamente, tales manifestaciones no constituyen un problema social en Cuba.
Pero ojo. Una simple división aritmética nos da un promedio de 5,8 denuncias diarias por esta causa. O sea, cada día hay al menos cinco menores de edad envueltos en presuntos actos de abuso que llegan a manos de la justicia. Y de cualquier forma, este es un tipo de problema en el cual un solo caso, para nosotros ya debería ser demasiado.
Y aunque si bien podríamos estar de acuerdo con “que —como expresó la funcionaria—en la nación caribeña no existen redes dedicadas a la trata y abuso de menores, y que las autoridades aplican una política de cero tolerancia hacia los delitos contra el normal desarrollo de las relaciones sexuales, de la familia y de la infancia y la juventud”, yo personalmente no me conformo con ese enfoque triunfalista.
Porque debemos estar muy claros que en este, como en otros delitos de naturaleza sexual o de violencia, los casos que llegan a presentarse como denuncia distan de ser la totalidad.
Además, hay múltiples formas de ir contra los derechos de la infancia y la adolescencia que no necesariamente son los abusos sexuales. Por ejemplo, hoy por hoy, no veo muy enérgica la actuación de la policía ante la utilización de menores en actividades lucrativas informales o en labores particulares.
Recuerdo particularmente una ocasión en que compartía con unas amistades de trabajo en el Malecón habanero hace ya algunos años, e hice fijación con un individuo que a altas horas de la noche representaba su espectáculo callejero en compañía de un niño muy pequeño.
Y este tipo de empleo de los infantes en actos o conductas que les denigran o los apartan de su descanso, el estudio u otras actividades propias de su edad, también tenemos que repudiarlo y si es preciso, denunciarlo ante las autoridades policiales, las cuales, por cierto, bastante presencia tienen en estos sitios públicos, y también podrían estar más alertas en este sentido, en lugar quizás de concentrar tanto su atención en los sitios y la manera en que comparten las personas homosexuales, bisexuales y trans.
Otro elemento que no podemos desconocer es que los instrumentos legales a los que hace referencia la funcionaria del Minint como mecanismos para garantizar los derechos de la infancia y la adolescencia, en particular “los códigos de Familia, de la Niñez y la Juventud, y un decreto sobre la Adopción”, hace rato que requieren una revisión y actualización, lo cual es un reclamo de muchos activistas por los derechos humanos y expertos en cuestiones de familia en la actualidad.
Resulta muy congruente y lógico con nuestro proyecto social que “el Estado cubano esté entre los 10 primeros que ratificó la Convención de Palermo sobre los derechos de los niños”, y me parece genial que “la Dirección de Menores del Minint y sus centros de protección trabajen para prevenir y detectar los delitos cometidos contra ese sector de la población, así como para evaluar y dar tratamiento educativo y especializado a las víctimas y sus familias”.
Pero, por favor, no nos quedemos en la simpleza de los porcentajes matemáticos y en el acomodamiento de las cifras para edulcorar nuestra realidad.
Francisco Rodríguez Cruz (Paquito el de Cuba)
Foto: Alain. L Gutiérrez
Francisco, para nada me parece que nos estemos quedando “en la simpleza de los porcentajes matemáticos y en el acomodamiento de las cifras para edulcorar nuestra realidad”. Muestra de cuánta importancia le concedemos, pueblo y gobierno, al tema del maltrato y el abuso infantil a pesar de su bajísima incidencia es la propia existencia de estos centros de protección. Lo ideal sería que no hubiese nunca una denuncia por hechos de este tipo, pero para prevenirlos y enfrentarlos se hace mucho, desconocerlo es ser sencillamente tremendista o criticar sin objetividad para hacernos escuchar.
Bla, bla, bla, artículo mmmmaaaaalooooooo!!!, señor Francisco, a ver si te enteras, la niñez de los cubanos no es perfecta, pero comparada con la de América Latina y muchos otros lugares desarrollados del mundo, está bien cerca de serlo. Al César lo que es del César, la grandísima verdad acerca del tema, pésele a quien le pese es que en Cuba los niños siempre han sido una prioridad…, que hay problemas: es verdad!, ahora díganme donde no los hay? Esas estadísticas merecen ser desglosadas para saber cuantas de esas denuncias pertenecen a casos serios, como el maltrato de niños por personas mayores y cuantas a casos de menor relevancia. No soy comunista, ni adorador del régimen, pero reconozco que la educación y la atención a la niñez siempre han sido un punto de cuidado en la Cuba de los Castros, tan solo piense en lo que habrían pasado los niños de algún otro país que hubiese pasado por solo la mitad de crisis y necesidades que ha pasado Cuba. Si el objetivo es desacreditar al régimen hay harto temas de sobra para hacerlo, pero este ciertamente no lo es, mas bien se desacredita quien trata de “ocultar el sol con un dedo”.
Totalmente de acuerdo con Gabriel. Nadie miniminiza cada denuncia, pero el bajo numero en comparacion con otros paises , demuestra que hasta ahora se ha trabajado bien y se va por buen camino en lo referente a los abusos infatiles. Me parece que enganchandote como una media de mujer haz estirado el chicle y haz hecho 12 parrafos de un analisis que nada tiene que ver con lo que demuestran las estadisticas. Que los cubanos cuidamos a los ninos y luchamos por que ni uno sufra, pero visto que hay personas de todo tipo, garantizamos que tengan un buen castigo y representen un por ciento infimo de los problemas sociales.
Tu artículo honestamente es el que pretende edulcorar la realidad.
Mi madre es psiquiatra infantil y dentro de sus funciones está la de perito médico en los casos de abuso de menores (abuso en el sentido amplio de la palabra, no sólo sexual). Los casos que hay son realmente pocos, además que el Minint los maneja con mano férrea.
En este país si algo tiene pocos problemas es la infancia, con las muchísimas carencias que hay (objetivas y subjetivas). Es cierto que las cifras no nos dicen nada, pero que escriban unos cuantos aquí cuántas veces han presenciado la explotación de niños en el trabajo. Quizás hayas visto un caso en el malecón, pero estoy seguro de que no tienes muchos más que referir.
Realmente siento impotencia de no poder decírtelo mirándote a la cara, porque es indignante la mala intención que tiene tu artículo.
Ponte a criticar otras cosas que sí están muy mal acá, pero este es uno de nuestros menores problemas (si no el menor).
Creo que la infancia en Cuba, aunque pueda tener problemas, no son como para criticarla. También hay que quitarse el disfraz de hipercrítico de la isla y asumir que la infancia en Cuba es de las pocas que se viven como infancia. Vivo en un país latinoamericano, ven a ver, entonces escribirás una enciclopedia.
Mis primeros años de trabajo fueron con la niñez y la juventud cubana. Y puedo decir que no existe una sociedad perfecta,( pero en mi experiencia la atencion a la niñez en Cuba, ha sido un tema prioritario. ASI….De PRIORIDAD…sin entrar en politiqueria, discriminacion racial,religgiosa ,diferecias economica, ubicacion geografica etc y como ninguna regla esta sin ecepcion, Grabo en mi memoria el sgte hecho.
….Aserradero. Sierra Maestra,una alumna de clases nocturna, tuvo su bebe y puso fin a su vida,,,fue condenada por tantos años, que en prision se convirtio en toda una profesional de la salud.
—-La ninez en Cuba desde la gestacion, recibe atencion ASI De claro ..(medicamentos para la madre durante el embarazo,casas maternas para los casos de riesgos, vacunas desde reciennacidos,hasta la adolescencias, servicio estomatologico etc .
(nunca mi hijo tuvo enfermedades infecciosas de la niñez) por que ? No creo que sea cuestion de una suerte o casualidad.
No justifico, manifestaciones y actuaciones de padres iresponsables, o quizas por necesidades economicas que los lleve a implicar a sus hijos en actividades que atenten contra su tranquilidad .Que dicho sea de paso, los padres cubanos mas bien se caracterizan por proteger a sus hijos,( No se si te pasaste de limite periodista ) Un niño que trasñocha sistematicamente, trabajando para el turismo en la calle, tiene su incidencia en la escuela, y ya hay personas encargadas de ese trabajo.( consejo de padres,trabajadora social etc etc,) No es tan facil
poder negar estas realidades cuando se han vivido y se ha trabajado durante tanto tiempo
Existe en Cuba empleo infantil? Esta lejislado ?, Tienes que ser cuidadoso periodista al emplear conceptos inadecuados,( dan poca credibilidad a tu articulo )
NO HABLO EN NOMBRE DEL SOCIALISMO NI DE LOS POLITICOS .
Hablo en nombre de la VERDA CUBANA
VERDAD, que se quiere minimizar u ocultar para manipula la politica de Cuba
Asi como se viven crisis en muchos paises del mundo hoy en Cuba hay situaciones criticas, Lo Ideal
LA voluntad de los pueblos, de los politicos, para dar soluciones. Soluciones justas…..JUSTAS