En medio de extensos apagones, pese al hasta ahora más pródigo invierno que en años anteriores, Cuba continúa el despliegue de parques solares de tecnología china a contramarcha, pero eventuales atrasos en el arribo de los componentes podrían retrasar las metas de mitigar o anular los déficits energéticos en los territorios.
“Mientras más demoren, más intenso será el trabajo nuestro”, afirmó Daniel Carrasco, al frente de la Dirección Integrada de Proyectos del parque solar fotovoltaico Ciego Norte, de la provincia de Ciego de Ávila.
En un reportaje que publica este lunes la edición digital del periódico local Invasor, el directivo se refirió al criterio colectivo de que lo único que los llevaría a incumplir el cronograma de ejecución de la obra sería que no llegaran en fecha los componentes que faltan.
“Podríamos haber comenzado a poner las mesas en noviembre, pero no teníamos los recursos a pie de obra”, narró Carrasco.“Terminamos de poner los pilotes el 11 de diciembre y el 17 fue que llegaron los tornillos para armar las mesas”, añadió.
La demora obligó a incrementar las fuerzas constructivas. Ahora dentro del parque laboran más de 200 personas, “solo en la armadura de mesas, labor que no es difícil, pero requiere de habilidad”.
De acuerdo con Invasor, todavía faltan más de 200 contenedores con distintos tipos de recursos por arribar a la obra.
Por su parte, José Alejandro, otro de los directivos de la obra, afirmó que la cuestión más crítica está en los componentes que no han llegado: “Si los siete inversores de 3.25 MW, junto a los transformadores, que vienen en contenedores, vía marítima, no están antes del 15 de febrero, no se puede entregar energía antes del 15 de marzo. Habría que ser un maratón imposible y no podríamos estirar los días más allá de las 24 horas”.
Hasta el día de hoy, describió la fuente, el parque está al 60 % de su ejecución física con 269 mesas armadas, 222 con paneles puestos y 146 certificadas, un trabajo desplegado por 27 brigadas formadas por entre cinco y ocho trabajadores.
A la par, ya comenzó el montaje del alumbrado interior y en la malla de tierra, es decir, el conjunto de todos los elementos, conexiones eléctricas y dispositivos que forman parte de una puesta a tierra.
El periódico avileño dijo que si se cumple el cronograma de construcción de Ciego Norte y el de otros parques en proceso de levantamiento en el territorio, el próximo verano la provincia avileña pudiera convertirse en la primera del país en autoabastecerse de corriente en el horario pico del mediodía.
La meta gubernamental es que el país disponga en el presente año de 55 nuevos parques solares fotovoltaicos, de unos 22 MW, en correspondencia con la estrategia nacional de transición energética, que prevé la instalación hasta 2028 de 92 parques que aportarán más de 2 000 megawatts (MW) de potencia.
Cuba deberá instalar este año 55 parques fotovoltaicos de los 92 en plan hasta 2028
El espejo chino
En el caso particular de Ciego Norte hubo que importar operadores chinos, pues las máquinas sufrieron percances serios al ser sometidas a un régimen de trabajo para el cual no estaban diseñadas.
Una característica solo presente en este parque, y en otro en construcción en la comunidad La Yuca, en el municipio cienfueguero de Abreus, ambos únicos por el tipo de soporte que emplean en sus mesas, obligó a la parte cubana a buscar soluciones urgentes.
El desafío consistía en sustituir los tornillos por campanas en las máquinas barrenadoras, aditamentos construidos en la planta mecánica Ignacio Agramonte, de Camagüey; en los talleres avileños de la Unidad Empresarial de Base Ferroazuc, de Ciro Redondo; en la Planta Fabric Aguilar Noriega, de Villa Clara y hasta en la propia China, adonde fueron a parar los prototipos diseñados por los especialistas del patio, relató el periódico.
De acuerdo con Carrasco, “al principio fue difícil la comunicación con los operarios de China”, pero verlos trabajando generaba admiración colectiva.
Llegaban bien temprano en la mañana y terminaban bien tarde, “hasta nueve y 10 horas de trabajo, con descanso de apenas media hora para el almuerzo, las gotas de sudar y aquella paz interior, sin inmutarse, sin dejar de trabajar, sin beber agua fría”, describió el dirigente empresarial.
“Los cubanos, no acostumbrados al ritmo, a esa faena, se dejaron ‘arrastrar’ y, juntos, llegaron a enterrar 1 000 pilotes. En unos 40 días hincaron más de 18 000 de estos elementos luego de que las máquinas fueran sometidas a una innovación que sustituyó los pasadores por copas más resistentes”, resaltó Carrasco.
Exactitud en los soportes de los paneles
Según el jefe de ejecución de obra, Leudis Pupo Alegría, ingeniero en Tecnologías Nucleares y Energética, los trabajos en el área requieren de gran precisión en un entorno donde la mano de obra habitualmente no realiza esas labores.
“En los inicios nos costaba trabajo llegar a las dos mesas diarias. Ya sobrepasamos ese número. No es tan fácil como nos pintaron. El trabajo requiere mucha precisión: distancia entre un elemento y otro, el atornillado, mantener la escuadra…”, refirió, por su parte, Héctor Jobe Pacheco, trabajador de la empresa Indalecio Montejo que interviene en el montaje de paneles y fabrica estructuras estructuras para naves y muebles.
Uno de los cuatro verificadores de calidad es Leonardo Valdés, supervisor de zona, quien chequea “desde que ponen los pilotes, que todo quede a nivel, hasta el último objeto de obra del parque”.
“Las fallas son mínimas. Nosotros las corregimos, revisamos y certificamos el trabajo que ellos hacen. Hay mucha calidad”, aseguró por su parte Juan Carlos Sorí Jiménez, un ingeniero con más de tres décadas de experiencia, citado por el periódico.
En el contexto de los parques fotovoltaicos, las mesas se refieren a las estructuras que soportan los paneles solares y resultan fundamentales para la instalación de los módulos fotovoltaicos, ya que proporcionan la inclinación y estabilidad necesarias para maximizar la captación de luz solar.
Las mesas, a su vez, permiten ajustar la inclinación de los paneles, lo que es crucial para optimizar la generación de energía a lo largo del día y durante diferentes estaciones del año.
El reportaje en el periódico Invasor, este lunes, coincidió con uno de los déficits de electricidad más altos de las últimas semanas.
Los apagones llegarán a afectar de forma simultánea a hasta 43 % del país, principalmente por falta de combustible y paros por averías y mantenimientos en varias centrales termoeléctricas, informó la Unión Eléctrica (UNE).
La isla sufre desde hace años una grave crisis energética, que se ha agravado en los últimos meses con tasas de déficit que han llegado a alcanzar el 53 % y tres apagones nacionales. Actualmente, algunas regiones sólo tienen suministro eléctrico durante cuatro horas al día, repasó la agencia española EFE.