Propiedad Intelectual en la práctica: consejos para empresarios y emprendedores

Ha llegado el momento de entender cómo diseñar una estrategia efectiva de protección legal para tu negocio.

Foto: Canva/OC.

En las dos primeras entregas de esta serie repasamos qué es la Propiedad Intelectual y cuáles son sus potencialidades para el crecimiento empresarial, además de evaluar en qué consiste una marca y de qué forma el derecho nos ampara para protegerlas.

Vistos estos temas, ha llegado el momento de entender cómo diseñar en la práctica una estrategia efectiva de protección legal para tu negocio. Para saber más, sigue leyendo. 

“El 93 % de las pymes con derechos de Propiedad Intelectual registrados ven un impacto positivo en sus negocios”, según un estudio realizado por la Unión Europea en 2022. Paradójicamente, el mismo texto afirma que solo el 10 % de las pymes dicen ser titulares de derechos de Propiedad Intelectual registrados. Los números hablan por sí solos. 

Está demostrado el impacto positivo que tiene una buena estrategia de Propiedad Intelectual para el crecimiento de las pymes, pero a su vez son pocas las que utilizan este sistema. Esto se debe precisamente a la falta de conocimiento en relación a los beneficios que puede ofrecer la Propiedad Intelectual a las empresas, pero si estás leyendo esta serie tienes en tus manos las herramientas adecuadas para prevenir errores en tu negocio. 

Veamos rápidamente algunos de los beneficios de utilizar los Derechos de Propiedad Intelectual para empresas:

¿Cómo diseñar una Estrategia de Propiedad Intelectual?

Cada estrategia variará en dependencia del modelo de negocio en cuestión. No obstante, te proponemos algunos principios generales que debes tener en cuenta a la hora de diseñar. 

I. Identificación de posibles activos de Propiedad Intelectual

La empresa debe realizar una auditoría para identificar los derechos de Propiedad Intelectual que pudiera tener, y tomar medidas para su protección. Este punto es medular, porque de no identificarse a tiempo, una  simple acción de divulgación/comunicación podría impedir que se obtengan los derechos a posteri

Por ejemplo, pensemos en una empresa que se dedica al diseño. Si esa empresa desarrolla productos que son novedosos y cumplen con los requisitos para su registro como diseño industrial, y no conoce sobre esta posibilidad, lo más probable es que los divulgue y de esta forma excluye la posibilidad de protección a posteriori y, consiguientemente, no podrá tener los derechos monopólicos sobre su creación. Otro ejemplo son los secretos industriales y comerciales. Estos existen en muchas empresas en forma de procedimientos, listados de proveedores, estrategias de comunicación, etc., y en muy pocas ocasiones se toman medidas para su protección. Es importante que este momento de identificar o auditar se realice acompañado de algún especialista en Propiedad Intelectual, pues de no hacerlo puede que potenciales activos pasen desapercibidos al ojo inexperto.

II. Protección de los derechos de Propiedad Intelectual

Una vez identificados los activos potenciales, es crucial desarrollar estrategias adecuadas para su protección. Este paso es fundamental, porque un mismo activo puede ser protegido mediante diversas modalidades de Propiedad Intelectual. La elección de uno u otro tipo debe considerar factores como costos, beneficios, duración de la protección, legislación vigente en cada país y objetivos comerciales de la empresa. 

Por ejemplo, la forma de un producto puede ser protegida simultáneamente como marca tridimensional, diseño industrial e incluso como obra protegida por derechos de autor. Además, es importante evaluar en qué jurisdicciones se llevará a cabo la protección del activo, siempre considerando la estrategia comercial de la empresa.

III. Comercialización

Una vez asegurados los derechos de Propiedad Intelectual, es fundamental planificar cómo aprovechar su valor comercial. Primeramente, será necesario evaluar este activo intangible, preferentemente por parte de un experto.

Posteriormente será posible determinar cómo comercializar ese activo: licenciamiento, franquicias, alianzas estratégicas, venta de los activos de Propiedad Intelectual o comercialización directa. 

Por ejemplo, la empresa A, que se dedica a hacer muebles, solamente opera en La Habana, pero gracias a las redes sociales ha ganado reconocimiento en todo el país y tiene potenciales clientes en las provincias orientales. No obstante, le es complejo poder llegar hasta allí con sus productos. 

La empresa B, por su parte, tiene disposición de asumir esos clientes de la empresa A, entonces esta le licencia el uso de la marca, los diseños de los muebles y los secretos industriales y empresariales para que la empresa B reproduzca su modelo de negocio, mientras la empresa A estará ganando regalías sin invertir dinero en ello. Además, la empresa A también seguirá aumentando sus ingresos a partir de la propia comercialización que realiza en La Habana. 

Otro ejemplo es la creación de alianzas estratégicas, como la que hicieran en su momento Nike y Apple. A partir de un acuerdo de colaboración ambas marcas han desarrollado productos y servicios como el Apple Watch Nike + (un tipo de reloj inteligente o smartwatch). En ese caso, ambas partes aportaron a la creación de un activo intangible y consiguientemente generan ingresos por este. 

IV. Control y monitoreo

Ambos son esenciales para garantizar que la estrategia de Propiedad Intelectual se mantenga efectiva y alineada con los objetivos de tu empresa. Por ello es necesario: monitorear a la competencia; vigilar el mercado para identificar y prever infracción de derechos de propiedad intelectual; hacer seguimiento de los derechos de Propiedad Intelectual de la empresa, así como de las contrataciones, para determinar si los derechos están bien protegidos o si es necesario renovar su registro o hacer nuevas valuaciones. Por fin, revisar la estrategia de Propiedad Intelectual para adaptarla a los objetivos de la empresa, a la tendencia del mercado y al escenario legal.

Que estés leyendo este artículo ya es un gran paso para que comiences a repensar tu postura ante todo lo que concierne a la Propiedad Intelectual. El segundo paso es elaborar una Estrategia de Propiedad Intelectual aplicada a tu modelo de negocio.

Obviamente, la estrategia de Propiedad Intelectual que se aplique a un restaurante nunca será la misma que la que debe adoptar una empresa de desarrollo de software. En el primer caso, por ejemplo, algunos tipos de derechos singulares son: secretos comerciales e industriales sobre las recetas, formas de elaboración de estas, listado de proveedores; diseño industrial del restaurante, entre otros. En el caso de la empresa de software tenemos: derechos de autor sobre los productos que desarrollan, secretos comerciales e industriales sobre algoritmos, métodos de procesamiento, planes de desarrollo de productos, diseño industrial de la interfaz gráfica, patentes de alguna invención.

Por todo lo anterior, insistimos en la necesidad de que sea un “traje a la medida”. De esa forma podrás maximizar el potencial de tu empresa. En el próximo artículo de esta serie te ayudaremos a realizar un autodiagnóstico en materia de Propiedad Intelectual. 

Para seguir esta serie:

1. Qué es y para qué sirve la Propiedad Intelectual

2. Qué son las marcas y cómo podemos protegerlas

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