Cuba espera cerrar el año con 4,7 millones de turistas, medio millón por encima del estimado inicial, de acuerdo con el Ministro de Turismo, Manuel Marrero. La cifra representa un crecimiento del 16,5 con relación a 2016, cuando Cuba logró por primera vez el récord de 4 millones de visitantes extranjeros.
En un informe presentado a la Comisión de Atención a los Servicios de la Asamblea Nacional, Marrero anunció que en el primer semestre de 2017 llegaron a la Isla más de 2,66 millones de turistas, un 23,2 por ciento más respecto al mismo periodo del año pasado.
Los ingresos por turismo en estos seis meses se calculan en 1.500 millones de dólares, un crecimiento del 9 por ciento en comparación con igual etapa de 2016; mientras que por turistas-día se incrementó un 11,8 por ciento, precisó Marrero.
El ministro comentó que Canadá se mantiene como líder emisor de viajeros a Cuba tras recuperarse de la baja experimentada en 2016, mientras que exhiben cifras “positivas” los mercados europeos tradicionales como España, Francia, Italia y Alemania.
En el caso de los visitantes de Estados Unidos dijo que muestra un alza de un 150 por ciento, a pesar de que los ciudadanos de ese país tienen prohibido hacer turismo en Cuba y deben acogerse a una de las 12 licencias de viajes aprobadas por la administración del ex presidente Barack Obama (2009-2017).
Esa dispensa, que flexibilizó los viajes a la Isla por motivos religiosos, culturales, educativos, de ayuda humanitaria y de intercambio personal con el pueblo cubano, sufrirá restricciones según la nueva política hacia Cuba anunciada por el presidente Donald Trump.
El ministro cubano del Turismo también avanzó que para 2018 la Isla se propone recibir 5 millones de visitantes extranjeros, propósito que confirma el plan de ampliar la capacidad de alojamiento del país.
Actualmente Cuba dispone de 67.769 habitaciones en hoteles, cifra que espera elevar a más de 100 mil para el año 2030. El incremento busca cubrir la alta demanda en los principales polos turísticos de la Isla como La Habana, el balneario de Varadero, la provincia oriental de Holguín y la Cayería Norte y la ciudad de Trinidad, en la zona central.
En cuanto al sector no estatal, Marrero precisó que existen alrededor de 2 mil restaurantes y más de 22 mil habitaciones en casas particulares con servicios de hospedaje, sobre todo en ciudades patrimoniales como Viñales, Cienfuegos, Trinidad, Camagüey, Baracoa y Santiago de Cuba.
Sobre los vínculos con el sector privado, señaló que su ministerio favorece y atiende estas formas de gestión, sin descuidar la promoción y publicidad de las instalaciones hoteleras y extrahoteleras estatales.
Cuba ha registrado en los últimos años un “boom” sin precedentes en el turismo, el sector más dinámico de la economía cubana y la segunda fuente de ingresos del país detrás de la venta de servicios profesionales al exterior.
OnCuba / EFE