El Banco de Crédito y Comercio (Bandec) de Sancti Spíritus decidió no reaprovisionar nuevamente los cajeros automáticos de la sucursal de la cabecera debido a la baja disponibilidad de efectivos, situación que pudiera extenderse a otros municipios.
Luis Francisco Castro Díaz, gestor de negocios de Bandec en el territorio, explicó a Radio Sancti Spíritus que quienes deseen extraer dinero de su tarjeta deben realizarlo a través del servicio de caja dentro de la propia sucursal con un límite de 5 000 CUP.
Banco de crédito y comercio en Sancti Spíritus no reaprovisionará a los cajeros automáticos. https://t.co/pT1OizbmEY
— Radio Sancti Spíritus #Cuba (@RadioSSp) April 24, 2024
La medida, que rige desde el pasado partes, obliga a los usuarios de Bandec a presentar en la caja su tarjeta personal y el carnet de identidad.
“Bandec comenzó con esa experiencia y probó por primera vez en una sucursal y hubo una buena aceptación de la población”, dijo a la emisora local Yudiana Afonso, coordinadora de programas y objetivos del Gobierno en la provincia.
La funcionaria responsabilizó a los llamados “mochileros” como los principales causantes de la escasez de efectivo para reaprovisionar los cajeros automáticos del territorio.
Según sus valoraciones, esas personas “se brindan a prestar sus nombres y sus tarjetas personales bancarias para que se le transfiera dinero de las Mipymes y trabajadores por cuenta propia para venir hacer la extracción a través de los cajeros”.
“Quisieron tratar de evadir las decisiones pero al final se enfrentó, se les explicó y hubo una buena aceptación de la población, al menos se vio beneficiada una mayor cantidad de la población de la que se estaba beneficiando a través de los cajeros automáticos accediendo a grandes cantidades de dinero y que por lo general no estaba retornando”, agregó.
Trascendió que la entrega de los 5 000 CUP por cliente es diaria, pero “con regulaciones”, para la identificación de personas que quieran evadir las medidas.
La tendencia a la retención de efectivo por la población, sobre todo por un grupo de actores económicos no estatales, se mantiene en el sistema económico cubano a pesar del proceso de bancarización impulsado por el Gobierno.
En un intento por mejorar la situación, y como parte del proceso, se han ideado con escasos éxitos medidas que limitan el uso del efectivo en las operaciones corrientes de las personas jurídicas, entre estas las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) que han florecido en el país, así como a la extracción de los bancos por parte de las personas naturales.
“Faltan por crear determinados escenarios en la economía para que los nuevos actores se desarrollen plenamente, sin necesidad de retener efectivo; fenómeno relacionado con la reducción de ofertas, y el propio incremento de actores”, reconoció en noviembre pasado Joaquín Alonso Vázquez, ministro presidente del Banco Central de Cuba (BCC)., durante su participación en el programa televisivo Mesa Redonda.