La Guardia Costera de Estados Unidos devolvió a Cuba entre el viernes y el sábado un grupo de 174 migrantes ilegales, según informó en página web.
El grupo de cubanos, del que no se ofrecen detalles de género y edad, se debe a once operaciones realizadas entre martes y jueves por distintas zonas de los Cayos de Florida y Bahamas.
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El primero de esos grupos fue tendido al amanecer del martes, aproximadamente a 50 millas de Cayo Cudjoe. Ese mismo día patrullas aéreas y navales avistaron precarias embarcaciones con migrantes en las proximidades de Cayo Marquesas, Cayo Largo, Islamorada, Cayo Sal (Bahamas) y Boca Grande.
El jueves fueron interceptados nuevos grupos en embarcaciones ya cercanas a Cayo Marquesas, Rebecca Shoal y Cayo Hueso.
“Las tripulaciones de los guardacostas y nuestras agencias asociadas están en plena actividad para salvar vidas y fomentar la migración segura y legal en los estrechos de Florida y los pasos de Barlovento y Mona”, declaró el teniente comandante Tanner Stiehl, del distrito siete de los guardacostas.
Desde el 1 de octubre de este año, la Guardia Costera de EEUU ha realizado 226 operaciones de este tipo. En el año fiscal (2022) que acabó precisamente en esa fecha, realizaron 6182 rescates, la cifra más elevada del registro que usualmente aporta la agencia, marcado en 2016, cuando los números cerraron en 5396.
Cuba vive una crisis migratoria que supera en cifras cualquier dato anterior. A través de la frontera entre México y el Estrecho de la Florida miles de cubanos se arriesgan con el propósito de emigrar a los Estados Unidos.
El aumento del flujo de cubanos que abandonan la Isla, tanto los que apuestan por trayectos por países de Centroamérica como los que se lanzan a la vía marítima en precarias embarcaciones, es atribuido por los analistas a la aguda crisis económica del país, y que incluye un alza del costo de la vida, la despiada devaluación del peso y la cada vez más incierta proyección de futuro.