Un grupo de paleontólogos que buscaba evidencias de la fauna extinta en Gibara, a unos 33 kilómetros de Holguín, encontraron restos fósiles de una tortuga terrestre gigante.
El hallazgo, a cargo del grupo nombrado “El Explorador Paleontológico“, encabezado por los investigadores Luis Mariano Rodríguez, Frank Cuesta Rodríguez y Orlando Sánchez Tamayo, se produjo en la cueva “La Campana”, ubicada a 1 km de esa ciudad, reporta ¡ahora!
Uno de los paleontólogo, Luis Mario Rodríguez, precisó al periódico local que fueron recobrados varios especímenes de esta tortuga, tanto de su carapacho como de la su parte inferior plana, “aunque la ausencia de la placa servical marginal del caparazón constituyó la característica diagnóstica“ que permitió “la identificación de este taxón extinto“.
Los restos de la tortuga, conocida también como Galápagos, pertenecen a una especie extinta y endémica de Cuba, nombrada científicamente Quelonoides Cubensis Leidy, señala el medio de prensa.
“Fue un galápago terrestre con aproximadamente la misma talla de las tortugas de las Islas Galápagos, que al parecer tenían los mismos hábitos alimenticios herbívoros que los perezosos cubanos“, precisa la nota.
Este tipo de tortugas habitó en Cuba durante el período Pleistoceno, hace aproximadamente dos millones de años. Su hallazgo constituye un aporte a la paleontología “porque amplía la distribución de esa especie en el territorio cubano“ y “enriquece los conocimientos sobre la de la paleofauna que habitó en esta zona de la región oriental de Cuba“.
En 2020, un grupo de científicos cubanos y estadounidenses confirmaron en cuevas de Matanzas el hallazgo de restos fósiles la Cathartes emsliei, una tiñosa extinta hace miles de años.
Confirman hallazgo de restos fósiles de una tiñosa extinta en Cuba
Los huesos del ave aparecieron en depósitos cavernarios y en las breas de San Felipe en Matanzas, pero es posible que hayan sido confundidos con la tiñosa Cathartes aura, que habita en la isla actualmente. El texto publicado por el boletín del Club Británico de Ornitólogos explica que el ave extinta tenía unos 53 cm de largo, desde el pico hasta la cola, y hasta 1.5 metros de envergadura.
Más atrás, en 2019, fue encontrado en Cienfuegos el primer fósil de pterosaurio del período Cretácico reportado en Cuba. Los vestigios de este reptil volador, que vivió entre el Triásico y el Cretácico hasta su extinción hace 65 millones de años, fueron descubiertos en la Región Paleontológica Damují, uno de los enclaves arqueológicos más importantes de Cuba.
Allí los científicos descubrieron en 2018 el fósil de estrella de mar más antiguo registrado hasta el momento en la isla y el único hallazgo en Cuba de un organismo similar proveniente del Cretácico.