Las autoridades de Honduras detuvieron este martes a 43 indocumentados de Cuba, Camerún y Haití, que ingresaron de manera ilegal al país y cuyo objetivo es llegar a Estados Unidos, según informó una fuente oficial.
Efectivos policiales detuvieron a 30 inmigrantes de Cuba, diez de Haití y tres de Camerún, cerca del punto de Agua Caliente, fronterizo con Guatemala, cuando viajaban en un autobús del servicio interurbano.
Todos fueron requeridos porque su estatus es ilegal en el país centroamericano y su destino final era Estados Unidos, precisó la Policía hondureña.
Los inmigrantes permanecen en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración en el departamento occidental de Ocotepeque, donde las autoridades decidirán si serán regresados a sus países o se les concederá un permiso para que crucen el territorio nacional, señaló la misma fuente.
Honduras se ha convertido en los últimos años en un punto de tránsito de inmigrantes, especialmente cubanos y africanos, que abandonan sus país con la idea de llegar a Estados Unidos.
En 2018 las autoridades hondureñas detuvieron a más de 4,000 extranjeros en diferentes puntos aduaneros del país, según cifras del Instituto Nacional de Migración.
La mayoría de los inmigrantes son detenidos en puntos cercanos a la frontera entre Honduras y Nicaragua en operaciones de las autoridades migratorias hondureñas.
Por lo general, según las autoridades de Honduras, los inmigrantes ingresan al país por pasos ciegos para eludir los registros en los puntos aduaneros.
A mediados de octubre de 2018 miles de centroamericanos -en su mayoría hondureños y salvadoreños- abandonaron su país en distintas caravanas con el afán de llegar a Estados Unidos y solicitar asilo, en un éxodo que causó choques diplomáticos entre Washington, México, Guatemala, El Salvador y Honduras.
En enero, al menos dos nuevas caravanas partieron desde Centroamérica, una de hondureños formada por unas 1.700 personas y otra de salvadoreños más pequeña, de unos 100 inmigrantes.