El joven pianista cubano Rodrigo García Ameneiro conquistó el Gran Premio del Rocky Mountain Music Competition, junto a la violinista polaca Rozalia Bryla. En el certamen compitieron más de cien concursantes procedentes de las más disímiles regiones del mundo.
Con sede en Toronto, Canadá, el evento virtual tuvo como jueces a prestigiosas figuras de la escena musical y grandes pedagogos del piano de Estados Unidos, Rusia, Jamaica, la República Checa y Austria.
García Ameneiro compitió con la obra “La danza del dragón violeta”, del compositor cubano Aldo López-Gavilán Junco, lo cual lo distinguió entre otros concursantes, toda vez que generalmente en este tipo de eventos se presenta una pieza del repertorio clásico tradicional. Este caso, según observadores, resultó algo inusual al tratarse de música cubana contemporánea.
Rodrigo García Ameneiro ha sido galardonado en múltiples ocasiones junto a la violinista Tania Haase, con quien integra el dúo Espira. Una de ellas es el Premio de Música de Cámara, en la categoría Master, en el Medici International Music Competition. El pasado año alcanzaron el máximo reconocimiento del Concurso Musicalia 2021, otorgado por la Facultad de Música de la Universidad de las Artes de Cuba, en la categoría formatos o conjuntos instrumentales.
García Ameneiro ha obtenido logros de altísimo nivel como el premio a la mejor composición del Stanford Jazz Workshop 2016; el primer lugar en el concurso internacional Vivo (2018) en el Carnegie Hall de Nueva York; y el premio especial en el certamen Grand Prize Virtuoso Ámsterdam (2019), junto a la violinista Tania Haase.
Enesima prueba de que la escuela cubana de piano es una de las mejores del mundo. Por cierto, creo entender que este joven es hijo de Rochy Ameneiro, una de las mejores voces de Cuba.
No soy músico ,pero la música , especialmente la buena música,me gusta.Tuve la oportunidad de disfrutar de la actuación de Rodrigo en una visita con su mamá a la escuela de arte Benny Moré,lugar donde trabajo , y allí dio muestras de su virtuosismo
Hay que ser Cubano para tocar sintiendo de ese modo!!
Muchas felicidades al joven Rodrigo y a quienes han contribuido a su formación como músico. Una vez más la escuela cubana demuestra su calidad internacionalmente.