Más de 900 hectáreas dañadas por incendio en Pinares de Mayarí

Las llamas alcanzaron el Parque Nacional Mensura Piloto, una de las áreas con mayor biodiversidad del país, en la que abundan especies de su flora y fauna endémica.

Un avión biplaza M-18 BS "Dromedario" (C), combate del incendio forestal de grandes proporciones, que afecta a la meseta de Pinares de Mayarí. Foto: Juan Pablo CARRERAS VIDAL/ ACN.

El incendio forestal de grandes proporciones que azota la zona de Pinares de Mayarí, Holguín, ha afectado ya más de 900 hectáreas, según datos preliminares ofrecidos desde el lugar.

Hasta el jueves, más de 900 hectáreas estaban afectadas por las llamas, según reportes del periodista Emilio Rodríguez. “Dispersión, principal obstáculo para controlar el incendio”, escribió desde su perfil de Facebook.

Varios aviones M18 y AN 2 se habían sumado este jueves al esfuerzo de los bomberos, integrantes del cuerpo de guardabosques, vecinos y también las fuerzas armadas (FAR), para controlar el fuego originado el pasado fin de semana.

Las llamas alcanzaron el Parque Nacional Mensura Piloto, que ocupa un área superior a las 8480 hectáreas y está considerada una de las áreas con mayor biodiversidad del país, en la que abundan especies de su flora y fauna endémica.

El director del Centro de Investigaciones Ambientales de Holguín, Wilder Carmenate, estima que este intenso siniestro dejará cuantiosos daños a la ecología, según citaba la agencia Prensa Latina (PL).

El experto se refirió al impacto en el sendero de La Sabina, donde habita una especie de pino local homónima catalogada de “mucho valor biológico”.

Hace unas semanas, se desató otro incendio forestal que causó severos daños en más de 1000 hectáreas (ha) de bosques en el municipio Mayarí, también en un área montañosa de Holguín.

Cuba registró en enero de este año más de 80 incendios forestales, una elevada cifra para ese mes, de acuerdo con informes del Cuerpo de Guardabosques de la isla.

Incendio en Pinares de Mayarí ya amenaza zonas de importancia económica

El origen de buena parte de estos desastres se atribuye a las quemas no autorizadas de hierbas o caña de azúcar, el empleo de vehículos sin malla matachispas y también la actividad de los cazadores furtivos.

El período crítico de incendios forestales en la isla abarca del 1 de enero al 31 de mayo, coincidente con la época de mayor sequía.

Efe/OnCuba.

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