Aun sin las termoeléctricas Antonio Guiteras, de Matanzas, y Felton, de Holguín, en funcionamiento, Cuba espera menos apagones este domingo, según el pronóstico de la Unión Eléctrica (UNE) de la isla.
De acuerdo con el reporte de la entidad, aunque con las dos principales plantas generadoras del país todavía fuera de servicio, a las 7:00 de la mañana la generación eléctrica cubría toda la demanda del país, en tanto para el horario pico nocturno se prevé una afectación de 394 MW.
Esta cifra es inferior a la de los últimos días en Cuba, cuando la afectación por déficit en la capacidad de generación ha superado los 400 y los 500 MW, lo que ha provocado apagones a lo largo del día y la noche.
Este sábado, por ejemplo, el servicio se afectó en desde las 8:23 de la mañana hasta después del mediodía, y luego entre las 16:45 y las 20:51 horas, con una afectación máxima de 513 MW a las 19:00 horas, según la UNE.
En estos momentos están fuera de servicio por avería la unidad 6 de la termoeléctrica (CTE) Mariel, la unidad 1 de la CTE Santa Cruz y la unidad de la CTE Guiteras. Además, se encuentran en mantenimiento la unidad 4 de la CTE Cienfuegos, la unidad 1 de la CTE Felton y las unidades 4 y 6 de la CTE Renté.
La UNE también reporta limitaciones en la generación térmica en el orden de los 192 MW, en tanto en la generación distribuidaestán indisponibles por avería 887 MW y en mantenimiento 320 MW.
Para el horario pico, la entidad estima el completamiento de la unidad 6 de Energas Boca de Jaruco con 30 MW, y la entrada de 276 MW en motores diésel.
Aunque entre diciembre y enero mostró signos de mejoría, Cuba atraviesa una compleja situación en su sistema eléctrico. Continuas roturas y salidas por mantenimiento, dificultades con el acceso al combustible y falta de financiamiento para ejecutar arreglos y nuevas inversiones, son parte del escenario cotidiano del sector, lo que ha derivado en reiterados cortes eléctricos y críticas y protestas de la población.
A ello habría que sumar también las recientes averías en el sistema eléctrico, que provocaron la desconexión de las provincias del centro y el oriente de la isla, y, en consecuencia, largos apagones en esas zonas.