Estimuladas por el creciente interés nacional en consolidar un turismo de lujo, 17 casas productoras y comercializadoras asisten desde hoy a la Fiesta Internacional del Vino en el Hotel Nacional de Cuba, de La Habana.
Con la mayor participación en la historia del evento, la decimocuarta edición atrajo a especialistas en la vinicultura de varios países como España, Portugal, Chile, México, Noruega e Italia, entre otros, quienes disfrutarán hasta el próximo viernes de un amplio programa de actividades.
La nación caribeña recibe por año más de dos millones de turistas procedentes de todo el mundo, sobre todo europeos acostumbrados a una gastronomía muy vinculada con el mundo vitivinícola; de ahí la relevancia de un foro que apuesta por fomentar la presencia y consumo de bebidas de alto vuelo.
Anfitriona y organizadora permanente de la cita, la emblemática instalación acoge en su salón 1930 a bodegas de prestigiosa trayectoria en el mercado vinícola, entre estas, Tobías, Joan Sardá, Heras Cordon SL y Gomes Segura Ibáñez.
También están presentes comercializadoras de reconocido trayecto, como Euro-Cuba, Freixenet, Inversiones Pucara S.A., ITM (Ibero Trust de Mercado), Euro Caribe Broker, Dioniso Internacional Trade y Duprasa.
Con el tradicional corte de cinta, Jesús Fernández, secretario general de la Cámara de Comercio de la República de Cuba declaró oficialmente abierta la edición de 2013, al tiempo que ratificó el apoyo de su institución a las entidades interesadas en comercializar con la Isla, en un ámbito de respeto y confiabilidad.
Según los organizadores del foro, durante tres días los participantes sostendrán debates, intercambios, presentación de nuevos productos y análisis sobre las tendencias en la industria turística, en particular el sector gastronómico.
El programa incluye exposiciones, charlas y muestra de campañas por las firmas distribuidoras, así como también catas a ciegas en las modalidades de vinos de calidad y de preferencia para los consumidores, con una convocatoria abierta a la participación de empresas de todo el mundo.
Para la segunda jornada está prevista una conferencia demostrativa sobre cómo maridar auténticos Habanos cubanos con excelentes vinos foráneos. Mientras que el viernes, el público disfrutará de presentaciones de tapas y “finger foods” para buscar la combinación ideal.
La fiesta es auspiciada también por la empresa Habanos S. A., y la Federación de Asociaciones Culinarias de la República de Cuba, puntualizó Víctor Rosquete, especialista comercial del hotel.
El público interesado en disfrutar del encuentro podrá acudir desde las 10 de la mañana hasta las cinco de la tarde, con un precio de 10 CUC por persona, informó Rosquete.
Conocida como la Casa del vino, el Hotel Nacional de Cuba recibió recientemente la Orden Lázaro Peña de III Grado, el primero en merecer este alto reconocimiento del Consejo de Estado, con el cual ratifica su aval como colectivo Vanguardia Nacional.
Fundada en 1930, la insigne instalación del Grupo Hotelero Gran Caribe propone incrementar el confort de sus áreas con el concurso de sus trabajadores, en busca de generalizar las mejores prácticas que contribuyan a un servicio de excelencia.
De vinos en Cuba…
Contrario a lo que muchos creen, el vino en la Isla tiene fuertes raíces, aunque el ron y la cerveza continúan como bebidas más demandadas por el ciudadano promedio.
Esta tradición, apoyada en la herencia española dentro de la familia criolla, permitió en el desarrollo del turismo como industria, la formación de los sommeliers o presentadores de cartas de vinos en restaurantes y hoteles.
Creado en 1995, el Club de Sommeliers de Cuba es una agrupación profesional de quienes realizan este trabajo para tener charlas y debates sobre la especialidad.
La culminación del trabajo de muchos años creó y fomentó esta especialidad en esta nación, y uno de sus frutos más notorios es precisamente el desarrollo de la Fiesta del Vino.
Según reporta un cable de Prensa Latina, la presencia vinícola en la Isla sobrepasa las 100 marcas, de España, Francia, Italia, Chile, Argentina o Sudáfrica, por citar algunos ejemplos.
Acota además que al año en Cuba entran, por lo menos, 400 contenedores de vinos, un estimado de cinco millones 760 mil botellas procedentes del extranjero.
Un cable de la agencia china Xinhua señala que en Cuba, el consumo del vino se ha incrementado en los últimos años, sobre todo en su mercado turístico, donde miles de visitantes encuentran muchas de sus marcas preferidas y de alta demanda internacional.
De forma paralela, la apertura masiva de iniciativas privadas en el ámbito de la gastronomía ha conllevado un rescate del glamour y el buen gusto en la cocina y la cantina cubana, sin olvidar la tradición criolla, dando paso a la degustación de platos de excelente factura acompañados de bebidas hasta el momento poco presentes en las cartas de restaurares.