El artista cubano Elio Rodríguez, residente en Elche, España, inaugura este jueves “Junglas” en el Museo de la Universidad de Alicante (MUA), una exposición colorista y con multitud de formatos con la que aborda la identidad afrocubana, sin pasar por el tamiz occidental, partiendo de la naturaleza salvaje, la selva.
Una identidad que se muestra “indómita, feroz, enraizada en la tierra, impetuosa y desbocada”, de acuerdo con lo informado por la Universidad de Alicante.
La muestra, que podrá visitarse hasta el próximo 5 de mayo en la Sala Sempere, tiene como punto de partida la obra maestra de su compatriota Wilfredo Lam, “La Jungla” (1943), en la que el arte y la cultura cubana se mezclan con el cubismo y el surrealismo europeo.
Elio Rodríguez presenta en esta exposición una treintena de pinturas, dibujos, bocetos, videos y, especialmente, sus esculturas blandas, que, de acuerdo con la crítica, son un divertimento, un juego de volúmenes, texturas y colores, en el que las formas se entrelazan, se rozan, gozan e invaden cada rincón del espacio.
David Alpañez, técnico del MUA y comisario de la muestra, junto a Susana Guerrero, ha explicado que “el recorrido expositivo cuenta con muchos formatos en torno a una temática común”, una muestra en la que han querido destacar “el carácter instalativo, no al uso, con la que se exhibe el proceso creativo”.
Todo en la obra de Elio se manifiesta lúdico, pero, tras la primera apariencia, hay un poso de oscuridad, de pena y desasosiego, una rendija por la que se filtran la amargura y el desconsuelo. No es que sus obras sean tristes, ni mucho menos, porque, en definitiva, Elio Rodríguez cultiva el humor.
Este artista nació en La Habana Vieja, se formó en el Instituto Superior de Arte y la Academia San Alejandro, y, desde hace más de 15 años, reside en Elche, según fuentes de la Universidad de Alicante.
Tiene un ‘alter-ego’ que es “El Macho”, un personaje estereotipado del negro cubano: seductor, burlón, sensual, sexual, guasón, lascivo, carnal, animal, exótico, ancestral, hipermasculino, salvaje, tropical, deseado, primitivo…
“El Macho” es Elio, pero llevado a la desmesura. “El Macho” es el instrumento del que se vale este artista para conocerse, para reírse de sí mismo y, al mismo tiempo, para, desde el humor y la irreverencia, analizar la identidad y la cultura cubana, desmontando los clichés, los estereotipos, las mentiras y las trampas de la política, la economía y la sociedad de su país y del mundo.
Elio Rodríguez ha expuesto por todo el mundo, principalmente en Estados Unidos, pero también en Brasil, Bélgica, China, Reino Unido y en su Cuba natal.
Sus obras forman parte de las colecciones del Museo Nacional de Artes (Cuba), la Embajada Cubana en China, la Bratton Gallery de Nueva York, la Southside Gallery de Oxford, La boheme Fine arts Gallery de Miami, la Foundation AMBA de Brasil y el Hainaut City Hall de Bélgica, entre otros.