Nacidos entre finales de los 70 y mediados de los 80, más de 35 artistas cubanos reivindican su energía creativa en la exposición “Ola Cuba!” en la ciudad francesa de Lille.
Pintores, fotógrafos, artistas plásticos y arquitectos forman parte de la muestra organizada por Lille3000, programa cultural promovido por el Ayuntamiento de esa ciudad del norte de Francia en la antigua estación de trenes Saint-Sauveur.
En la exposición, abierta hasta el 2 de septiembre, los artistas hablan sobre la memoria o la apertura de su país al mundo. Dentro de su gran diversidad, no faltan obras interactivas o efímeras como “Fango” (2012), de Elizabet Cerviño, en la que las figuras de arcilla desaparecerán con el tiempo.
Las esculturas, instalaciones o pinturas no solo transmiten al público mensajes sobre la historia de Cuba, sino que amplían el campo de reflexión para llevarlo al terreno de la arquitectura, de la naturaleza, de la diversidad étnica o de las migraciones.
“Todo empezó con la visita de la alcaldesa Martine Aubry a La Habana tras haber recibido la invitación del codirector de la Galleria Continua Lorenzo Fiaschi, un espacio fundado en Italia en 1990 y que existe en Cuba desde hace tres años”, dijo a la agencia Efe la consejera cultural cubana Laura Salas.
El juego de palabras con los términos “hola” y “ola” surgió de la necesidad de expresar la creatividad de los artistas mediante una metáfora y, a la vez, recordar “las inclemencias del tiempo” que conoce la Isla.
Entre la pluralidad de creaciones destaca la pieza “Escala de Valores”, imaginada por Mabel Poblet y empezada hace cinco años, que recopila informaciones e imágenes sacadas de la prensa nacional.
“Diferentes familias cubanas colaboraron en la creación de la obra, ya que recortaron todas las noticias e imágenes de los periódicos que iban leyendo en su día a día”, explicó Poblet a Efe.
Estos papeles unidos entre sí por hilos podrían simbolizar una “lluvia de información” de una prensa “con criterio editorial único” y, al mismo tiempo, invitan a imaginar una noticia desde otra perspectiva, “viendo las imágenes sin el texto”, añade.
Otra obra impactante es la de José Yaque, titulada “Tumba Abierta” (2007-2009), que reúne más de 3,000 elementos vegetales, plantas, raíces, cortezas, frutas o flores contenidos en botellas que colocó en una gran estantería como reflejo del “ciclo de la vida” gracias a la su constante transformación.
“Es una acumulación de todo lo que encuentro por mi paso. Empezó a crecer en Cuba y siguió en Italia, donde posteriormente la presenté en la Bienal de Venecia, como parte del pabellón de Cuba”, comentó Yaque.
Otros artistas presentes en la muestra son Abel Barroso, Duvier Del Dago, Alexis Leyva “Kcho”, y Wilfredo Prieto.
Esta generación, creadora de nuevos horizontes, sirve como testigo para ilustrar los cambios de la sociedad cubana, según los organizadores de la muestra, que los considera portadores “de una libertad de expresión todavía frágil, pero inédita”.
EFE / OnCuba