Todas las ciudades del mundo tienen sus propios ángeles. La Habana comparte los suyos, los muestra, los regala. Guardianes de la ciudad de los vivos y de los muertos, los seres alados nos miran desde la altura, atados a los muros con sus alas de piedra.
Muy lindo. Bello.
Es una hermosa galería Robert. Abrazos.
buenas fotos Rober, felicidades!
Desde los tiempos más remotos
vuelan los ángeles guardianes,
siempre celosos de sus votos
contra atropellos y desmanes.
Junto a las cunas infantiles,
junto los tristes moribundos,
cuentan que velan los gentiles
seres con alas de otro mundo.