Dedicado al bicentenario de la poeta, novelista y dramaturga Gertrudis Gómez de Avellaneda, el décimo quinto Festival Nacional de Teatro de Camagüey se celebrará entre los días 4 y 11 de octubre, según información ofrecida a Oncuba por Freddys Núñez Estenoz, presidente del evento.
Veintinueve obras teatrales, agrupadas en tres áreas temáticas, discurrirán sobre las tablas de la ciudad, mostrando al público y la crítica especializada las piezas más relevantes de la escena cubana en los últimos dos años.
De tal suerte, Pálpito y Realidad reunirá las producciones contemporáneas, mientras que Buena Memoria recordará espectáculos destacados en ediciones anteriores (entre ellos “Delirio Habanero” de Teatro de la Luna). Asimismo, Nuevas Escrituras acogerá las muestras realizadas por y para jóvenes.
El programa de la cita incluye exposiciones fotográficas y de pinturas, presentaciones de libros y encuentros con la crítica. Destaca este año la primera reunión internacional de directores de festivales de América Latina y el Caribe, con el propósito de intercambiar ideas y programar encuentros entre compañías cubanas y extranjeras.
Nuñez explicó que para lograr una mayor organización todas las funciones se efectuarán en las tardes y las noches. En las mañanas en la sala Fénix del reinaugurado cine Casa Blanca sesionarán los fórums, la premier de documentales y el resto de los eventos teóricos. Dijo también que varios grupos visitarán los municipios de Minas, Sibanicú, Jimaguayú y Florida, como parte de un periplo ideado para llevar el Festival a personas alejadas de la capital provincial.
La inauguración está prevista para la noche del 3 de octubre en la sala José Luis Tassende y correrá a cargo del conjunto local Teatro del Viento, quien estará presentando “El millonario y la Maleta”, un clásico de la literatura cubana, escrito por La Avellaneda en el siglo XIX.
Adaptada para la ocasión por el dramaturgo Norge Espinosa, la obra no dista de la cotidianidad nuestra de todos los tiempos y habla de ciertas ignominias humanas, nunca desterradas por los cubanos. Es una trama sencilla, desatada por las ambiciones de una madre interesada en lograr un matrimonio jugoso para alguna de sus tres hijas. La puesta, a cargo del propio Freddys, cuenta además con el magistral diseño de vestuario de Nieves Laferté y una escenografía de lujo, consecuencia de la precisión de los maestros Jesús Ruiz y Gabriel Hierrezuelo.
Colateral al evento, y como parte de la celebración por el bicentenario de la escritora camagüeyana, los investigadores Luis Álvarez y Olga García Yero impartirán una conferencia sobre la vida de quien es considerada una de las máximas exponentes de las letras hispanas.
El Ballet Folklórico de la provincia presentará Sab, coreografía inspirada en la novela homónima de la literata. La actuación será el día 6 a las nueve de la noche en el Teatro Principal. En ese mismo lugar y hora pero el día 7 la cantante Luna Manzanares regalará su voz a los lugareños. Una noche después los asistentes podrán reír gracias al humor inteligente de Kike Quiñones.
Para los infantes habrá funciones en el Guiñol y La Edad de Oro. Y Para adultos sesionarán las salas de la Academia de Artes Vicentina de la Torre, de Teatral Teatro y de Espacio Interior, así como el resto de los coliseos mencionados. Se suma, nuevamente como área interactiva, el Teatro Avellaneda, uno de los más antiguos de la urbe, aún en proceso de restauración.
Además de los sitios convencionales, los organizadores han previsto actuaciones en plazas y calles de la antigua villa de Puerto Príncipe, hoy Patrimonio Cultural de la Humanidad. Es el caso de las agrupaciones D´Morón Teatro, Andante (Bayamo) y Tecma (Pinar del Río).
Como es tradición, funcionará un Café Teatro en las noches y madrugadas, durante toda la semana del Festival. Conducido por el actor cubano René de la Cruz (hijo), ese espacio estará ubicado en la instalación gastronómica El Potro, sita en la calle República, muy cerca del Hotel Colón. Allí intervendrán además Kafé Verde y Teatro de la Luna, siempre después de las 11 de la noche.
En entrevistas realizadas a varias personas de la ciudad, Oncuba constató la alegría de la gente por la cercanía del Festival Nacional de Teatro. Georgina Cabrera Reyes, vecina del Centro Histórico, aseguró haber participado en todas las ediciones anteriores, desde su fundación. “Tras el Período Especial muchos pensamos que se extinguiría, pero por fortuna sobrevivió. Y todos lo esperamos con muchos deseos, porque esta es una ciudad de gente amante del teatro”, afirmó.
En junio de 1983, gracias al esfuerzo del escritor Rómulo Loredo, la villa principeña se erigió como tribuna para mostrar las mejores producciones del teatro de Cuba. Para esa fecha ya sesionaba el Festival de La Habana, con carácter internacional, pero la propuesta camagüeyana se tornó ideal, por cuanto no existía un ámbito para que los grupos cubanos confrontaran sus creaciones.
Según Nuñez Estenoz, la 15 edición será una de las más grandes de los últimos tiempos. Desde la pluralidad de manifestaciones artísticas, la cita apuesta por lograr mayor integración entre el movimiento teatral de todo el país. En exclusiva para Oncuba el dramaturgo recomendó “Fíchenla si pueden” de Argos Teatro, “Mundo de muertos” de Estudio Teatral Macubá y “Delirio Habanero”.
Las artes escénicas salen nuevamente de La Habana y llegan a la suave comarca de pastores y sombreros, que impacta por su laberinto de calles, por sus edificaciones coloniales y por el orgullo y la cultura de su gente: todo está listo para el Festival Nacional de Teatro.