Con una obra dedicada en gran parte a la historia de Cuba, el director y guionista Tomás Gutiérrez Alea “Titón” (1928-1996) trascendió a nivel internacional, además de su complejo y comprometido ideario teórico, por obras consideradas hoy “clásicas” dentro del cine cubano y latinoamericano como La muerte de un burócrata (1966), Memorias del subdesarrollo (1968) o Fresa y Chocolate (1993), esta última nominada al Óscar como mejor película extranjera.
Titón incursionó en el cine en 1948 y dos años después se integró a la Sociedad Cultural Nuestro Tiempo. En Roma estudió Dirección de Cine, en el Centro Sperimentale de Cinematographia. Lo aprendido en Italia se refleja en su primer largometraje Historia de la Revolución (1960).
16 de abril de 1996: Fallece en La Habana, a los 67 años el célebre cineasta cubano Tomás Gutiérrez Alea (Titón), uno de los máximos exponentes del bien llamado séptimo arte en su país y en América Latina. Había nacido en la capital cubana el 11 de diciembre de 1928. #BNCJM pic.twitter.com/DMHpuXSbAm
— Biblioteca Nacional de Cuba José Martí (@BiblioNacCuba) April 16, 2023
“Este cineasta se mete con lo que cree que está mal en el socialismo. Alguien me decía, y estoy plenamente de acuerdo, que el guion del socialismo es excelente, pero que la puesta en escena deja mucho que desear, y por lo tanto debe ser objeto de crítica. Es la mejor manera de contribuir a su mejoramiento”, declaraba el cineasta a La Gaceta de Cuba en 1993.
Para el crítico e investigador Juan Antonio García Borrero, el cine de Gutiérrez Alea habló de una utopía, soñó con ver realizada la utopía “y también tuvo tiempo de admitir que una utopía jamás pasará de articular, de modo bien precario y siempre con carácter provisional, lo que Chantal Mouffe llama el consenso conflictivo”.
Titón falleció en La Habana a la edad de 67 años, víctima de cáncer. Terminaba así la vida de un intelectual apegado, estrictamente, a la ética y a su verdad.
En ocasión de celebrarse el aniversario 90 de su nacimiento, Casa América de Madrid dedicó un ciclo de conferencias con la participación de su viuda, la actriz, dramaturga, guionista y realizadora Mirtha Ibarra; el guionista y director Fernando Pérez y el español Carlos Saura.
En aquel momento el conocido director de Clandestinos y Suite Habana aseguró que “Titón luchaba cada segundo contra el conformismo, tensando dentro de sí mismo la cuerda de su arco creativo.”
Según Fernando Pérez, el rigor de Gutiérrez Alea no era una camisa de fuerza disciplinada y escolástica, “sino el rigor de ir más allá, de intentar despejar la bruma que nubla cada creación artística”, confesó.
Como homenaje a su impronta, en diciembre de 2020 se creó en La Habana Vieja la Casa de Titón y Mirtha, un espacio concebido para la investigación y promoción cinematográficas.
El centro, ubicado en el barrio de San Isidro, fomenta el intercambio cultural a través de proyecciones de películas para toda la comunidad.
Fuentes: Programa Ibermedia, Enciclopedia Digital del Audiovisual Cubano (ENDAC).