José Alberto Justiniano Andújar ni pensaba ser El Canario cuando el Beny le atravesó el alma y le hizo mirar a Cuba. Los padres, dice, le aderezaron los primeros años con Rolando Laserie, La Sonora Matancera y otros grandes de la mayor de las Antillas. Había nacido en Santo Domingo el 22 de diciembre de 1958. Se fue joven a Puerto Rico y en poco tiempo se convirtió en una súper estrella de la salsa. Ya pasado el tiempo, reconocido en casi todo el orbe y con más de treinta discos José Alberto El canario ha vuelto a mirar a la isla de la música y ha pactado un reencuentro con parte de sus referencias musicales. EL Septeto Santiaguero ha sido la puerta.
“A mí qué. Tributo a los clásicos cubanos es un homenaje a figuras importantes de la música cubana de siempre, contiene doce temas que consideramos que no deben morir nunca. Quisiéramos que la gente ahora se emocione con ellos igual que nosotros nos emocionamos alguna vez con las grabaciones originales. Es un disco muy variado, para bailar y escuchar. Siempre quisimos darle continuidad al homenaje a Los Compadres, de hecho este es el segundo disco de una trilogía; lo que esta vez hemos querido ser más abarcadores, es un paseo más amplio por la música cubana en el que homenajeamos a varios emblemas como Beny Moré, la Aragón, la Sonora Matancera, Los Guaracheros de Oriente, Joseíto Fernández, Celina y Reutilio, Chappotín y Cuní… También le hemos puesto su poquito de changüí y de vieja trova santiaguera.
Es un disco con muchos invitados…
Sí, varios. En esta ocasión me traje a Gilberto Santa Rosa, quien se nos escapó en el álbum anterior con El Septeto, y ahora canta dos temas a los que le puso mucho corazón; mi hermano Pancho Céspedes, como siempre puro sentimiento; también arrastramos al club a nuestro colega Alexander Abreu (quien canta y toca la trompeta en un tema bien timbero), a Orlando Valle “Maraca” y su flauta, Edwin Colón Zayas y su cuatro boricua, y muchos más. También quiero destacar la participación de mis compatriotas: Krency García “El Prodigio”, un virtuoso del acordeón, y la participación especial de músicos de Juan Luis Guerra como Juan de la Cruz “Chocolate”, Rafael Carrasco y Janina Rosado.
¿Cómo José Alberto El Canario se hizo fanático de la música cubana?
Todo el que gusta de la buena música es fanático de la música cubana, así de simple. Nuestros padres nos criaban escuchando la música que salía de de Cuba. Por obligación algo se te queda y el son es una música inolvidable, que se te queda para siempre. Fíjate que personas que no hablan el idioma, disfrutan de la música cubana. La muestra más relevante en los últimos tiempos es Buena Vista Social Club, con voces como Ibrahím Ferrer, Compay Segundo y Omara Portuondo.
¿Cuáles fueron sus principales influencias?
Soy fanático de muchos, necesitaría toda una página, son demasiados. Pero ahora –aclarando que se me quedan muchos– te puedo mencionar al Beny, a Rolando La Serie, Celia Cruz, la Aragón, Chappotín, Cuní, Arsenio, Miguelito Valdés, Abelardo Barroso, Los Compadres, Cachao… Sin olvidar a Antonio Machín, Bienvenido Granda, Olga Guillot (la favorita de mi madre) y un montón más. Los salseros de los últimos 50 años, somos copia fiel de todos estos grandes de la música cubana, son nuestras influencias.
¿Qué piensa de la música cubana actual?
Me gustaría ampliar un poco en esta pregunta, pues mi gusto por la música cubana no es solamente por la tradicional. Disfruto mucho con Los Van Van, Issac Delgado (con quienes he compartido muchas tarimas), Adalberto Álvarez, Havana de Primera (para mí una de las más fuertes representaciones de la música cubana en la actualidad), Alain Pérez (un músico excepcional), El Niño y la Verdad (Emilio es tremendo talento, sonero natural, con quien tuve el placer de grabar el tema “Salsa o son”), al igual que Alain Daniel (con quien grabé ” Qué pena que te vas mañana”, idea surgida después de compartir tarima en La Habana). No puedo dejar de mencionar a Cándido Fabré (maestro de la improvisación), a Elito Revé (a quien le agradezco que me haya permitido cantar “Yo no quiero que seas celosa”), a mi amiga Aymee Nuviola, a Pedrito Martínez… Soy fanático de Gente de Zona, Orishas, Descemer Bueno, Laritza Bacallao… Y no solamente disfruto la que es para bailar, pues en New Orleans el año pasado pude presenciar el show de Daymé Arocena y me impactó, inigualable; también Kelvis Ochoa, Leoni Torres, Sampling… Y es bueno que la música cubana actual se esté conociendo más fuera de la isla; pero hay que cuidarla, pues como mismo hay muy buenos exponentes también hay gente que le puede hacer daño, todos estos baluartes tienen que velar por que se mantenga la calidad que se deriva de sus escuelas de música y tratar de que los de hoy se acerquen a los de ayer para que no se pierda la sabrosura de la música cubana de antes, que se adueñó en su momento de la industria musical latina.
José Alberto El Canario tiene un sello disquero, ¿además de sus producciones qué otras producciones ha editado o producido?
Tenemos un sello: Los Canarios Music, que además de mis producciones solo ha editado música cubana, como es el caso del álbum pasado de El Septeto Santiaguero, Raíz. Y un disco que quiero recomendar a todos los bailadores y a los que gustan de la música cubana, es Yo vengo de Cuba de la Charanga Cubanísima, acabadito de salir. Es de lo mejor que hemos escuchado recientemente, puro sabor.
¿Tiene en agenda alguna próxima visita a Cuba?
Sí, y estamos muy contentos con eso, por una invitación que me acaba de hizo mi hermano Issac Delgado, para participar en un festival en Varadero, en el mes de julio. Para dicho festival logramos conversar también con mi compadre Gilberto Santa Rosa para que nos acompañe, así que será gozadera completa. Nos vemos en Cuba pronto.
¿Qué cree de la salsa y su aceptación en las nuevas generaciones?
Interesante pregunta, sobre el tema tengo una visión muy particular, a lo mejor otros no la comparten; pero a pesar de que la radio actual impone, y fuerza al oyente a escuchar determinado tipo de música, la salsa sigue vigente en el gusto de diferentes generaciones. Especialmente en las nuevas generaciones hay aceptación por la salsa, la muestra está en mis shows, en los que nunca falta gente joven.
Si te vas a Perú, a Colombia, por mencionar dos ejemplos recientes y asistes a un concierto donde este El Gran Combo, con más de 50 años de existencia, vas a encontrar jóvenes de apenas 20 años de edad cantando cada éxito y recuerda que una persona que tenga 35 años de edad, no había nacido cuando yo arranqué a cantar, entonces algo tiene la salsa que todavía arrastra multitudes. La salsa es un género con muchos artistas activos y con carreras de más de 25 años, eso es un mérito. Ya ves, aquí estamos por 45 años repartiendo salsa. Creo que hay salsa para rato.