John y Patrick Hemingway, nietos del novelista norteamericano Ernest Hemingway (1899-1961), están en Cuba para celebrar los aniversarios 60 del otorgamiento del Premio Nobel de Literatura a su abuelo, y 80 de la compra de su yate El Pilar, informa la Agencia Cubana de Noticias.
Desde el domingo salieron de Estados Unidos acompañados por biólogos marinos y expertos en pesca deportiva, con quienes estarán en la Isla hasta el 13 de septiembre promoviendo también programas de cooperación sobre recursos naturales en el Estrecho de la Florida, confirma la web del Latin America Working Group Education Fund (LAWGEF), entidad que junto a la Conferencia Pugwash sobre Ciencias y Asuntos Mundiales y Global Arts/Media, organizaron la visita.
“En 1934, Ernest Hemingway invitó a representantes de la Academia Nacional de Ciencias de Filadelfia a viajar en su amado yate El Pilar para que realizaran investigaciones sobre las agujas en el Estrecho de la Florida. En ese tiempo no había un embargo contra Cuba y este tipo de intercambio científico se podía realizar con frecuencia. Después de 50 años sin relaciones diplomáticas y en un mundo donde los recursos naturales son cada vez más escasos, ahora es el momento de promover intercambios científicos con nuestros vecinos geográficos en lugar de aislarlos”, se explica en la página.
No obstante, el mismísimo John Hemingway de conjunto con Robert McCracken Peck, profesor titular de la Academia de Ciencias Naturales de la Universidad de Drexel, publicó hoy en el Philadelphia Inquirer las razones de su viaje.
“Hoy, en los mares al norte de Cojímar, y por toda la costa del sur de la Florida, las agujas, atunes y otros peces que Hemingway tanto amó y que inspiraron sus trabajos literarios, están bajo mucha presión por la pesca excesiva, la contaminación, y otras amenazas del ambiente. Reunir y compartir información básica sobre estas especies y su comportamiento migratorio será un paso esencial para permitirle a ambos países entender y proteger mejor estos recursos marítimos vulnerables que son tan importantes para nuestras economías turísticas y de pesca.
“(…) Hoy, 80 años después de su colaboración con los estudiosos, es momento para revisitar este aspecto importante del legado de Hemingway. Esperamos que al hacer esto ayudemos a mejorar los lazos entre Cuba y los Estados Unidos para el beneficio de ambos pueblos y de los recursos naturales de los cuales los dos dependemos”, escribe John.
Pero Patrick, el otro nieto del célebre escritor, no se queda detrás y en una corta entrevista concedida a The Vancouver Sun comenta sobre las maneras en que celebrarán los aniversarios del abuelo: “Mi hermano mayor John y yo tenemos 10 minutos para dar un discurso. Yo hablaré de mi abuelo y mi padre y sus relaciones con el pueblo cubano, y compartiré algunas historias sobre mi estadía en cuba. Probablemente compartiré algunas historias que oí de mi abuelo cuando iba creciendo”.
Agenda apretada
Los nietos deHemingway se hospedan en el hotel Ambos Mundos, donde su abuelo viviera en los años 30 del siglo pasado y ya cenaron en La Bodeguita del Medio, restaurante favorito del escritor.
Su programa, circulado en algunos sitios web, comprende para hoy navegar a bordo de una flota de embarcaciones del Club Náutico Internacional Hemingway hacia el reparto habanero de Cojímar, poblado costero inmortalizado en “El viejo y el mar” y donde está el restaurante-bar la Terraza de Cojímar cuyos cantineros aún preparan los platos y cócteles preferidos por el novelista.
Allí se efectuará la pequeña ceremonia conmemorativa del 80 aniversario del primer viaje de El Pilar, en esa embarcación -que fue donada a Cuba y se encuentra en el Museo de Finca Vigía- navegó el escritor desde Key West a La Habana en 1934, explica Notimex.
El martes tienen organizado un encuentro en la Oficina del Historiador de La Habana y un tour por la parte vieja de la ciudad, así como una visita a la UNEAC (Unión de Escritores y Artistas de Cuba) y una entrevista con el escritor Leonardo Padura.
El miércoles abordarán las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, y viajarán a la Marina Hemingway para el aniversario del Club Náutico fundado en 1992. Luego estarán en el Centro de Investigaciones Marinas de la Universidad de La Habana.
El jueves visitarán el Acuario Nacional donde sostendrán debates en torno a la cooperación entre la nación estadounidense y la Isla en materia de educación científica marina y se llegarán a Finca Vigía, en San Francisco de Paula, sitio que fuera el hogar de su abuelo aquí.
Se comenta en redes sociales que para la ceremonia de aniversario, de otorgársele el Nobel a Hemingway, se trasladará a La Habana la medalla que él mismo depositara en el santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, en Santiago de Cuba.
Un día antes de irse, el viernes, pasarán por las academias San Alejandro, de artes plásticas, y Alejandro García Caturla, de música.
Ernest Miller Hemingway tocó tierra cubana, por vez primera, unos meses antes de cumplir los 28 años. Solo estuvo de paso, pero después realizaría unos 12 viajes a la mayor de las antillas, país en que pasaría los años más prolíficos de su carrera y donde obtuvo el Premio Pulitzer (1953) y el Premio Nobel de Literatura (1954) por la obra de la vida pero, fundamentalmente, por El viejo y el mar.
“Siempre tuve suerte escribiendo en Cuba”, afirmó alguna vez.