Los hijos de Reino Unido vuelven a la ciudad, cuando se cumplen 250 años de que los ingleses tomaran la Habana, para proponerles a los cubanos una muestra de lo mejor de la cultura británica contemporánea.
Con ese objetivo del 4 al 10 de junio venidero los habaneros y todos aquellos que se encuentren de paso por la capital podrán disfrutar de las más variadas expresiones artísticas que conforman el vasto universo de la cultura británica.
Esta jornada pondrá a disposición del público cubano una representación de los filmes más recientes producidos en ese país que abordan temas como la tolerancia, el amor, la igualdad de género y otros temas sociales, los cuales serán exhibidos en el Multicine Infanta.
También habrá presentaciones teatrales de grupos ingleses y cubanos. Por la parte visitante ofrecerán Las Tumbas Olvidadas del grupo de actores de la Peña Meisner dirigida por el británico Stephen Bayly, basada en la antología Spoon River de Edgar Lee Master; mientras que el grupo Teatro El Público dirigido por Carlos Díaz realizará una presentación especial de Noche de Reyes, la obra homónima de William Shakespeare que mezcla puestas en escena anteriores de obras del afamado escritor británico.
Para los amantes de la danza la prestigiosa compañía Candoco, ofrecerá del miércoles 6 al sábado 9 un espectáculo en el Teatro Miramar. Esta agrupación fundada en 1991 fue la primera de Reino Unido especializada en la integración de bailarines discapacitados y no discapacitados. Sus integrantes han viajado a más de 50 países y han colaborado con coreógrafos de renombre internacional.
Otro de los atractivos es la celebración de una carrera de 100 metros en la Ciudad Deportiva de La Habana a propósito de la celebración en agosto de los Juegos Olímpicos de Londres.
Completan el programa de la semana británica en Cuba exposiciones de pintura, de fotografía, de cerámica inglesa encontrada en excavaciones arqueológicas en la ciudad, así como intercambios entre músicos británicos y cubanos.
Esta avalancha cultural llega de la mano del Ministerio de Cultura, la Oficina del Historiador de la Ciudad y la Embajada Británica.