El Teatro Cuyás acogerá este viernes y sábado el concierto navideño de la Gran Canaria Big Band, que en esta ocasión “revive” al músico cubano Benny Moré, el sonero mayor que ha dado la isla caribeña a golpe de ritmos latinos y jazz, y promete dificultades para controlar los pies en la butaca.
A lo largo de 90 minutos, la Gran Canaria Big Band intentará reproducir, lo más fiel posible, el espectáculo que en su momento brindaba Benny Moré con su Banda Gigante en las salas de La Habana, y lo hará con la voz de Lázaro Armenteros, descendiente del músico, y los arreglos de Luis Guerra, que durante años ha hecho “arqueología musical” para recuperar los ritmos de Moré.
En esta ya tradicional cita navideña, la Gran Canaria Big Band busca también conmemorar el 60 aniversario del fallecimiento de este músico cubano que fue de los precursores del Latin Jazz, al introducir este estilo norteamericano en su Cuba natal en los años 50.
Tal y como ha prometido el director de la Gran Canaria Big Band, Sebastián Gil, este jueves en la rueda de prensa para presentar el espectáculo que acoge el Cuyás, “habrá temas en los que será imposible, como mínimo, no mover los pies”.
“Lo que vamos a hacer, con la diferencia de tiempo y de sonido que hay, es reproducir ese espectáculo que hacía Benny Moré lo más fiel posible (…) y Lázaro Armenteros, familiar suyo, hará de él”, ha detallado Gil, quien ha apuntado que, si el público cierra los ojos, “seguramente escuche a Benny Moré deambular por la sala”.
Tanto el viernes, 29, como el sábado, 30 de diciembre, a las 19:30 horas, los ritmos de temas como “Bonito y sabroso”, “Hoy como ayer”, “Qué bueno baila usted” o “Cómo fue” llenarán la sala de son montuno, mambo, guaracha y bolero, y recuperarán esos ritmos que tanto bailaron las generaciones pasadas de padres y abuelos.
“La música está ensayada, pero el personaje de Benny, que en este caso será Lázaro, pues será una sorpresa, porque el propio Benny era imprevisible”, ha explicado.
Ese trabajo de reproducción, ha insistido, tiene todavía más valor porque gran parte de la música de Moré y su Banda Gigante desaparece, ya que muchas veces no existían partituras al quedar todo grabado en directo.
Gil ha dicho, en ese sentido, que Moré tenía una forma “muy peculiar” de dirigir su Banda Gigante, ya que iba señalando a los músicos cuando quería que tocaran, “y a lo mejor iban inventando los mambos”, por lo que lo que ha hecho Luis Guerra “es plasmarlos en partituras para que se puedan volver a reproducir”, algo que ha sido un trabajo casi de “arqueología musical” durante años.
Por su parte, la consejera de Cultura del Cabildo de Gran Canaria, Guacimara Medina, ha destacado cómo la Gran Canaria Big Band ya se ha convertido en una “habitual” para cerrar el año de programación en el Teatro Cuyás, y cómo cuenta con un repertorio “que a nadie deja indiferente”.
Ello, ha indicado, es una forma de “empatizar con nuevos públicos”, de acercarse a gente que no suele ir al teatro o que no suele escuchar este tipo de música, una cuestión que ha considerado importante.
“No debemos buscar la cantidad sino la calidad de los contenidos y el que podamos ver público nuevo”, ha asegurado Medina, quien se ha puesto este reto por delante para los próximos años de gestión en el área insular de Cultura.
Por su parte, el director artístico del Cuyás, Gonzalo Ubani, ha agradecido el apoyo de la Corporación insular por la “suerte” que tiene su equipo de trabajar “con la tranquilidad” de que existe esa ayuda por parte del Cabildo de Gran Canaria.
Las entradas para estas dos funciones de la Gran Canaria Big Band pueden adquirirse en la web del teatro, teatrocuyas.com, y en taquilla en horario de lunes a viernes, de 17.00 a 20.30 horas, y el sábado dos horas antes de que comience el concierto.