Freddy, la que lloraba boleros

No tuve que preguntar mucho, enseguida supieron a quién buscaba. Es una pena decirlo: como ella quedan muy pocas. Por eso he venido a este bar. Tienen razón los escritores. Los lugares que funcionan de noche, no deberían nunca ser vistos a la luz del día. Todo el polvo, todas las penas que cuentan esos … Sigue leyendo Freddy, la que lloraba boleros