La brisa del mar y el malecón habanero han bendecido el surgimiento de un nuevo espacio para el disfrute y la presentación de la música electrónica en el país. El Castillito, club recreativo ubicado en calle 1ra. entre l0 y 12 (Vedado), fue el lugar escogido para el desarrollo de esta oferta cultural, promovida por el proyecto Analógica PMM 2 que dirige Joyván Guevara, más conocido como Djoy de Cuba.
La oportunidad de acceder a las creaciones más recientes de este género musical en la Isla y el mundo por un precio de 25 pesos en moneda nacional que incluye el baño en la piscina, así como la posibilidad de intercambiar experiencias y sensaciones con jóvenes que comparten similares gustos musicales, resulta una opción interesante para los domingos de 6:00 p.m. a 1:00 a.m.
Cuando leí el anuncio de este nuevo espacio pensé que, quizás, no habría mucha asistencia del público debido a su reciente surgimiento. Es cierto que al llegar no encontré una multitud de personas, sin embargo poco a poco fueron llegando los invitados al baile. Unos estaban dispuestos a disfrutar al máximo de la fiesta y se divertían desde temprano; otros como yo, expectantes, sondeaban el terreno.
Me dediqué a observar el ambiente y mientras escuchaba la mezcla de sonidos fue muy fácil encontrar opiniones como esta: “Es genial que uno pueda escuchar otra música además de regueatton y salsa; además, es momento de que los Djs tengan la posibilidad de mostrar lo que están haciendo en un lugar concebido con ese objetivo y que reciban más promoción para que otros se interesen por su trabajo”, comenta la joven Arianna mientras su voz se confunde con el ritmo contagioso.
Yulo, por su parte, reconoce que es muy despistado y olvidó su traje de baño pero regresará el próximo domingo porque se siente contento con esta opción. Él respeta los gustos musicales de todas las personas y precisamente por tal razón, piensa que deben existir lugares para las más disímiles tendencias: “Así uno puede elegir el que más le satisface y reunirse con quienes comparten preferencias parecidas”.
Dayana cuenta que se enteró de este nuevo espacio gracias a una promoción que le enviaron a su teléfono móvil. Aclara que la piscina fue un elemento clave para decidirse a visitarlo. “Sí porque podemos disfrutar de la música que nos gusta y además darnos un chapuzón. Es un todo incluido. A eso se suma que las ofertas gastronómicas están baratas, o sea, que también podemos comprar algo de comer”.
Djoy de Cuba lo tiene muy claro: “Es necesario expandir el horizonte musical de las nuevas generaciones, mostrarles otros géneros y ofrecerles la música cubana más emblemática de una manera diferente y atractiva, utilizando ritmos actuales. También pretendemos contribuir a la evolución de las fiestas masivas con una oferta juvenil dinámica y seductora pero, a la vez, sana”.
El fundador del Festival de Rotilla y uno de los principales promotores de la electrónica en el país considera además que “esta es una oportunidad magnífica para cautivar a otros jóvenes que aún no han descubierto el género y, sobre todo, para que los productores nacionales encuentren una nueva motivación”.
Por tal razón, este innovador del mundo sonoro – miembro de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) y de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) – no cesa en sus empeños y además de ocuparse de la organización de Analógica PMM 2, ultima los detalles de un proyecto similar que funcionará todos los sábados en el Café Cantante del Teatro Nacional de Cuba.
“Queremos mostrar que hacemos arte, que nuestra música atrae público y que es posible mantener la alegría y la disciplina a través del espíritu de la música”.
Muy bueno este artículo de esta periodista que permite que los jovenes conozcan las nuevas opciones que tienen para compartir con sus amistades.
Muy intersante porque ayuda a divulgar otra opcion para el entretenimiento de los jovenes