Varias de las figuras más prominentes del atletismo cubano en la actualidad, incluido el saltador Juan Miguel Echevarría y la pertiguista Yarisley Silva, han emprendido viaje a Europa para completar la etapa final de preparación rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio, que comenzarán dentro de 40 días en la urbe japonesa.
Echevarría, Silva, especialistas del triple salto y otros exponentes del campo y la pista se encontraban en La Habana, donde habían realizado una serie de confrontaciones a fin de mantener el ritmo de competencia y, en algunos casos, buscar las marcas de clasificación que exige World Athletics para la inscripción en los Juegos de Tokio.
Ahora continuarán ese trabajo en España, donde establecerán su base de operaciones durante las próximas semanas. De ahí tendrán que moverse a otros países europeos para intervenir en algunas competencias, en las cuales ya se enfrentarán a rivales de máxima envergadura, incluso, algunos de los potenciales contrarios de las Olimpiadas.
Todavía una ruta competitiva definida, pues algunos eventos están pendientes de confirmación. De cualquier manera, es un hecho que las triplistas Liadagmis Povea y Davisleydis Velazco estarán el mitin de Madrid dentro de una semana, según reportó el sitio digital JIT.
Povea (25 años), tercera en el ranking de la temporada, buscará reafirmar que su estirón de 14.93 metros hace menos de un mes en La Habana no fue obra de la casualidad.
Por otra parte, es casi un hecho la participación de Juan Miguel Echevarría en la parada de la Liga de Diamante en Mónaco, de acuerdo con declaraciones del preparador Daniel Osorio a la televisión nacional.
El saltador camagüeyano ha competido poco al aire libre en la presente temporada y ostenta un 8.30 metros como mejor marca, registro que lo ubica en el sexto lugar del ranking de la temporada, liderado por el griego Miltiadis Tentoglou, único que se ha ido por encima de 8.50 en la temporada.
La meta de Juan Miguel es ir progresando poco a poco y superar sus marcas hasta llegar a un examen de rigor como la Liga de Diamante en Mónaco. Allí debe presentarse el 9 de julio, a solo días de comenzar los Juegos Olímpicos, por lo que el resultado de ese compromiso nos dirá con más exactitud cuál es su condición real de cara a la lid estival.
También tendrá muchas miradas encima la pertiguista Yarisley Silva, que este sábado, horas antes de partir a Europa, saltó 4.60 metros en La Habana. Ese es su marca cimera de la temporada, pero debemos tener en cuenta que hasta 16 contrincantes han superado esa barrera en la actual contienda al aire libre.
De cualquier manera, la periodista Eyleen Ríos, de JIT, señaló que la pinareña no ha podido saltar en eventos internacionales este año y no se ha medido a ninguna de sus potenciales rivales, por lo que es prácticamente imposible exigirle marcas superiores en un contexto nula competitividad.
Por ellos reviste tanta importancia el paso por Europa y la oportunidad de competir al más alto nivel, lo cual debe permitirle mejorar su rendimiento y llegar a Tokio en buena forma deportiva. No obstante, es válido aclarar que los tiempos gloriosos de Yarisley parecen estar en el olvido, por lo que incluirse en la final olímpica ya sería un excepcional resultado.
El atletismo cubano tiene 18 figuras clasificadas a los Juegos Olímpicos y las mayores esperanzas de medallas y títulos se concentran en el disco femenino y el salto de longitud masculino. Yaimé Pérez, quien ya ha competido y ganado en las últimas semanas, y Juan Miguel Echevarría, son los dos claros favoritos a escalar al podio y mantenerse como los rostros distintivos de una disciplina que ha ganado al menos una medalla para Cuba en cada uno de las Olimpiadas desde 1964 hasta la fecha.