Aliet Arzola Lima
El lanzador pinareño Vladimir Gutiérrez (Cincinnati Reds) se convirtió este viernes en el cubano número 220 que debuta en el béisbol de Grandes Ligas, luego de realizar una apertura de calidad frente a los Chicago Cubs en el mítico parque Wrigley Field, donde su buen rendimiento no tuvo premio por el pobre apoyo ofensivo de su equipo.
El diestro, oriundo de Mantua, trabajó cinco capítulos en los que permitió solo dos imparables, pero uno de ellos fue un jonrón del antesalista David Bote, a la postre decisivo, pues nadie más pisó la goma en una tarde tempestuosa en la ciudad de Chicago.
“Son las Ligas Mayores, la mejor del mundo. Tenía muchas ganas de salir y lograr un buen desempeño para obtener una victoria, pero desafortunadamente no ganamos hoy”, dijo Gutiérrez, quien reconoció que tuvo algo de nervios al inicio del partido frente a los Cubs.
“Creo que en la primera entrada estaba temblando un poco allí, especialmente con primer bateador. Una vez que pasé ese inning respiré un poco mejor. Después llegué al dugout, todos estaban allí y pude relajarme”, añadió el pinareño, el cubano número 100 que actúa como lanzador en Grandes Ligas.
Gutiérrez agradeció las sugerencias de los entrenadores de pitcheo sobre tomarse su tiempo en la lomita y permanecer en calma. “Eso ayudó hoy”, apuntó el vueltabajero, quien dijo sentirse satisfecho por su actuación y con los mensajes de felicitación de su familia, sus amistades y los fanáticos.
First MLB career strikeouts in the book. 📕
Congrats, Vladimir Gutierrez❗️ pic.twitter.com/oX0rt9PwhY
— Cincinnati Reds (@Reds) May 28, 2021
En cinco entradas de labor, Vladimir realizó 67 pitcheos, 47 de ellos strikes y casi la mitad (46 %) en la zona baja. Dependió mayormente de su recta de cuatro costuras, aunque apostó por el cambio, la curva, la slider y la sinker.
David Bell, mentor de Cincinnati, catalogó la actuación de Gutiérrez como sobresaliente en un día en que soplaba mucho el viento. “Atacó, lanzó strikes y su recta estuvo muy viva, realmente lanzó y confió mucho en ese pitcheo, aunque también mostró buenas bolas quebradas, buena curva, buena slider. Parecía totalmente imperturbable por estar aquí, pero sé que fue muy significativo para él. Lo manejó extremadamente bien.”
A pesar de los elogios, Gutiérrez no corrió con suerte. Los Reds dejaron diez corredores en circulación y batearon de 7-0 con hombres en posición de anotar, por lo que no hicieron ni el más mínimo daño al pitcheo de los Cubs.
De esta forma, el cubano es tan solo el quinto lanzador en la historia que pierde su apertura de debut en las Mayores pese a cubrir 5+ innings y permitir 2- jits y 1- carreras. De hecho, algo como esto sucedía desde el 2012, cuando Chris Rusin (Cubs) sucumbió en su estreno vs. Milwaukee luego de completar cinco entradas a ritmo de un imparable y una anotación en su cuenta.
El resto de los serpentinero que han perdido en su primer duelo en Grandes Ligas (como abridores) tras cubrir 5+ innings y permitir 2- jits y 1- carreras son Brad Hand (Florida vs. Atlanta en 2011), Cliff Lee (Cleveland vs. Minnesota en el 2002) y Brad Havens (Minnesota vs. Detroit en 1981).
A su vez, Vladimir Gutiérrez es el tercer lanzador cubano en la historia de las Mayores que en su apertura de debut trabaja 5+ entradas, permite 2- jits y 1- carreras. Lo habían logrado antes Mike Fornieles (nueve entradas en blanco, con un jit permitido) el 2 de septiembre de 1952 (Washington vs. Philadelphia Athletics) y Roennis Elías (cinco entradas, dos hits y una carrera permitida) el 3 de abril del 2014 (Seattle vs. Oakland).
Antes de esta salida de Gutiérrez, el último lanzador cubano con una apertura de 5+ entradas, 2- hits y 1- carreras permitidas fue Rogelio Armenteros (Houston vs. Texas) el 21 de julio del 2019.
Gutiérrez fue promovido esta semana desde Louisville –sucursal de AAA de los Reds–, donde había logrado dos victorias en tres aperturas durante la presente temporada, con 17 entradas de labor, 21 ponches, siete boletos, efectividad de 2.65 y WHIP de 0.941. Su tasa de estrucados en este inicio de contienda era de 11 por cada nueve innings, y promediaba tres ponches por cada pasaporte gratis.
