Todos los focos estaban sobre el Wanda Metropolitano, nuevo santuario del Atlético de Madrid y sede de la venidera final de la Liga de Campeones. Allí, Cristiano Ronaldo saltaba por primera vez a un terreno de juego en la capital española desde que dejó el Real Madrid el verano pasado.
Pero mientras todos se concentraban en la estrella portuguesa, los colchoneros montaron su propia fiesta y desarticularon el entramado defensivo de los italianos, golpeados en dos jugadas a balón parado. En tanto, CR7 y sus acompañantes de la Juve no pudieron derrumbar el muro rojiblanco.
Con dos goles de ventaja, el Atleti buscará en Turín el pase a cuartos y, por ende, mantenerse en carrera para disputar la final de la Champions en el Wanda Metropolitano, aunque los precedentes de equipos campeones en su feudo son inexistentes.
En toda la historia de la máxima competición de clubes de Europa, solo dos conjuntos han ganado en su país (Juventus en Roma-1996 y Dortmund en Munich-1997), y ninguno se ha coronado en su parque.
Por otra parte, desde el 2012 ningún equipo ha logrado llegar a la final de la Champions en su estadio. El último plantel en lograrlo fue el Bayern de Munich y perdió en penales contra el Chelsea.
El objetivo del Atleti es acabar con esa maldición.
En el otro duelo de la jornada, el Manchester City sobrevivió con susto en su visita al Shalke 04. Dos goles en las postrimerías salvaron a los ingleses, que perdían 2-1 con un hombre menos a poco tiempo de culminar las acciones.
Guardiola respiró con la remontada, pero el dubitativo desempeño de su equipo despierta dudas de cara a próximas fases, más exigentes y ante rivales de mayor cartel.
Repasemos los relatos de estos partidos, que cierran la ida de los octavos de final.
La “garra charrúa” del Atlético somete a la Juve
José María Giménez y Diego Godín, los dos centrales uruguayos del Atlético de Madrid, anotaron sendos goles en jugadas de balón parado en el último cuarto de hora y el conjunto español asfixió a Cristiano Ronaldo para conseguir una victoria de 2-0 ante Juventus.
Gracias a una gran segunda mitad, el equipo de Diego Simeone sacó una valiosa ventaja con miras a la vuelta el 12 de marzo en Turín.
Luego que el videoarbitraje (VAR) incidiera dos veces en contra de los anfitriones, Giménez remeció las redes a los 78 minutos tras el cobro de un tiro de esquina y dos rechaces dentro del área que dejaron el balón a la deriva en el área de la Juve.
Godín sentenció a los 83 al definir de volea desde una posición incómoda y con Cristiano respirándole cerca. “Estos partidos se definen por detalles. Hoy, dos balones parados”, dijo Godín.
Cristiano fue abucheado de principio a fin durante una noche discreta en su primer partido en la capital española desde que se fue del Real Madrid en el verano pasado. El astro portugués tuvo su mejor ocasión de gol al probar con un bombazo de tiro libre a los 10 minutos, pero apenas gravitó tras ello.
“Contra el Atlético hace falta tener paciencia, precisión en los pases y maldad. Cuando se juega contra el Atlético, no hay grandes ocasiones. Ellos hacen que juegues mal y que el partido sea más lento”, señaló el técnico de la Juve, Massimiliano Allegri.
Bajo una marca pegajosa, Cristiano no pudo aumentar su cuenta goleadora ante el viejo rival, uno al que atormentó durante cuatro temporadas seguidas en la Liga de Campeones, en las cuales los eliminó con la camiseta del Real Madrid.
Cristiano “jugó un buen partido. Está acostumbrado a este tipo de encuentros”, valoró Allegri. “Todo el equipo bajó su rendimiento en el segundo tiempo. Es una lección que necesitamos aprender para la vuelta.”
El Atlético sonrió al final pese a que el VAR le llevó la contraria en el trámite. La tecnología revirtió un penal que había señalado por una falta sobre Diego Costa en el primer tiempo y anuló un tanto de Álvaro Morata en el segundo.
“Sigo creyendo y esperando que el VAR ayude a todos para que el fútbol sea más justo”, comentó el argentino Simeone, quien celebró el primer tanto de su equipo con una seña obscena que le podría acarrear una sanción por parte de la UEFA.
Los locales dominaron tras un primer tiempo parejo en el Wanda Metropolitano. Tanto Costa como Antoine Griezmann fallaron oportunidades claras de gol antes de que Giménez encontrara las redes. El uruguayo se apoderó de un balón perdido dentro del área y aprovechó el regalo.
Godín envió al ángulo su disparo, luego que la zaga no logró despejar un centro enviado por el francés Griezmann en tiro libre. El disparo pareció desviarse ligeramente en Cristiano, quien era el jugador más cercano a Godín pero no pudo tapar.
“Afortunadamente fuimos capaces de sobreponernos a las decisiones en nuestra contra con el VAR”, dijo Godín. “Fue un gran resultado, anotando dos goles y sin recibir ninguno, pero tenemos que estar preparados para los últimos 90 minutos en Turín.”
Agonía del City para ganar con un hombre menos
Con 10 hombres y dos goles en el epílogo del encuentro, incluido uno de Raheem Sterling a los 90 minutos, Manchester City superó 2-3 a Schalke 04 en la ida de los octavos de final de la Champions, nuevamente con protagonismo del arbitraje.
Después de que Leroy Sané igualó por el diezmado City a los 85 minutos mediante un espectacular tiro libre ante su equipo anterior, Sterling superó al zaguero Bastian Oczipka y marcó el tanto decisivo.
Sterling persiguió un largo despeje del arquero Ederson Moraes y definió con serenidad mediante un tiro rasante.
“Pueden ver que la voluntad logra mucho. Nunca nos rendimos, siempre queremos seguir peleando”, dijo Sané, quien se dijo “un poco triste” por anotar ante el Schalke, su antiguo equipo.
Tras conseguir su gol, el alemán levantó la mano izquierda e hizo un gesto para disculparse con los seguidores del Schalke que alguna vez lo adoraron pero que ahora quedaron atónitos.
El argentino Sergio Agüero había inaugurado el marcador a los 19 minutos para el City, pero el Schalke dio la vuelta con ayuda del VAR y convirtió dos penales durante un tramo caótico de siete minutos hacia el final del primer tiempo.
El primer penal se sancionó al juzgar que el argentino Nicolás Otamendi había tocado con la mano un disparo de Daniel Caligiuri. Tras un retraso de casi cuatro minutos –el árbitro no recibió ayuda del monitor junto a la cancha por una supuesta falla–, Nabil Bentaleb convirtió desde los 12 pasos a los 38 minutos.
A los 45, el volante hizo lo mismo. Esta vez, el trámite para marcar el penal fue más ágil, luego que Fernandinho sujetó por detrás a Salif Sane en un tiro libre.
Otamendi recibió una segunda tarjeta amarilla a los 68 minutos, por una falta sobre Guido Burgstaller, pero el City supo recuperarse en Gelsenkirchen.
Y con ello, parece probable que el club inglés consiga su boleto a los cuartos de final por tercera vez en cuatro años. El City jamás han conquistado el máximo trofeo europeo, pese a que sus dueños de Abu Dhabi han desembolsado ingentes cantidades de dinero en la última década.
Los campeones de Inglaterra siguen buscando trofeos en cuatro frentes durante esta temporada. Lideran la Liga Premier, juegan el domingo la final de la Copa de la Liga Inglesa, y están en cuartos de final de la Copa de la FA.
Pero no hay que precipitarse, recomendó el técnico del City, Pep Guadiola.
“Hoy hemos regalado dos penales y una tarjeta roja, y en una competición como ésta, ello no es muy bueno”, advirtió el español. “Todavía no estamos listos para pelear en las últimas etapas, pero el resultado es bueno.”
Cuando se le preguntó si los penales a favor del Schalke fueron sancionados correctamente, Guardiola respondió: “Creo que sí, son dos penales. Confío en el VAR, a veces discuto, pero no ahora.”
Con información de The Associated Press