La Asociación de Fútbol de Cuba (AFC) informó este miércoles que la selección absoluta masculina de ese deporte no jugará los partidos de la fecha FIFA correspondiente al mes de septiembre, debido a la compleja situación provocada por la pandemia.
Una nota de la AFC, citada por el sitio digital Jit, explica que el impacto del coronavirus tanto en el continente americano como en Europa complejizan los traslados aéreos y el desarrollo de cualquier evento amistoso u oficial dentro de la Isla.
La autoridad del fútbol cubano asegura, además, que se continúa trabajando con mayor objetividad “para el desarrollo de los partidos de octubre y noviembre de fecha FIFA”.
#Cuba no jugará partidos de fecha #Fifa en septiembre
Asociación de Fútbol de Cuba envía comunicado a nuestra redacción. #futbol #CONCACAF https://t.co/2zhSl4RKrH pic.twitter.com/scw10JmSJi— JIT Deporte Cubano (@jit_digital) September 1, 2021
Cuba logró reunir a varios de sus mejores jugadores en la selección de mayores para sus más recientes compromisos internacionales, en los que se notó una mejoría en el juego del equipo, a pesar de que algunos se veían las caras por primera vez.
Con el llamado a futbolistas que juegan en ligas foráneas, entre ellos el talentoso delantero Onel Hernández, los cubanos lograron dos victorias en las eliminatorias para la Copa del Mundo de Catar 2022.
El juego de la selección mejoró conforme avanzaba la competencia y tras caer frente a Guatemala (0-1) y Curazao (1-2) en las primeras fechas, el equipó logró encadenar dos victorias frente a Islas Vírgenes Británicas (5-0) y San Vicente y las Granadinas (1-0).
La prueba definitiva para los cubanos sería la Copa Oro, celebrada en Florida, EE.UU., un torneo para el que el plantel se mantuvo concentrado y entrenando en Nicaragua. Sin embargo, el conjunto no recibió las visas necesarias para viajar a suelo estadounidense, lo que echó por tierra el sueño de los futbolistas y los seguidores del “más universal de los deportes” en la Isla.
Ahora, la imposibilidad de jugar en la fecha FIFA de septiembre trunca otra oportunidad para engrasar el juego colectivo del equipo antillano y abre un nuevo compás de espera con vistas a mejorar sus resultados y ascender competitivamente dentro de la región.