Aliet Arzola Lima
El Trentino, actuales monarcas mundiales a nivel de clubes y campeones hace un mes de la CEV Cup (segundo torneo de mayor importancia en el concierto europeo), contrataron al atacante cubano Luis Tomás Sosa, uno de los seis voleibolistas de la Isla implicados en el tristemente célebre “caso Finlandia”.
Sosa, acusado de violación en el país europeo junto a Rolando Cepeda, Ricardo Calvo, Dariel Albo, Abrahan Alfonso y Osmany Uriarte, llevaba dos meses entrenando con el elenco italiano, pero no se había oficializado ningún contrato hasta la presente semana.
“Significa muchísimo en mi carrera deportiva”, declaró Sosa en exclusiva con OnCuba desde Italia, donde por estos días presencia los play off semifinales de la Serie A, en los que su nuevo equipo se mide el poderoso Lube Civitanova de sus compatriotas Osmany Juantorena, Yoandy Leal y Robertlandy Simón.
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“Lo estoy viviendo como una segunda parte de mi carrera que voy a aprovechar al máximo”, añadió el antillano, quien tendrá una nueva oportunidad en las canchas tras vivir hace tres años un breve calvario en prisión que lo alejó de la actividad competitiva.
Afortunadamente para él, salió absuelto luego del proceso de apelaciones, demandó al gobierno finés por daños y prejuicios y recibió una indemnización de 200 mil euros, aunque al final, por concepto de abogados e impuestos, recibió menos dinero.
Este es un paso gigante para el joven –cumplirá 24 años en mayo próximo–, quien tendrá la oportunidad de probarse en un circuito de nivel mundial y con uno de los mejores equipos italianos del momento, aunque cabe la posibilidad de que salga cedido para que disponga de más minutos en la cancha.
“Estoy agradecido con todas aquellas personas que me ayudaron, y doy gracias también a aquellas que me dieron la espalda, aquellos que me dijeron que no tenía nivel para estar en el equipo nacional”, apuntó Sosa, quien confesó que esa decisión todavía le duele.
“Me duele un poco, sí, porque a todo jugador siempre le gusta participar con su selección”, puntualizó el cubano, quien ahora comenzará desde cero e intentará grabar su nombre en el complejo concierto del voleibol profesional.
En el Trentino de Angelo Lorenzetti, si finalmente se queda, Sosa compartirá con figuras relevantes como el norteño Aaron Russell, el espectacular líbero francés Jenia Grebennikov, el poderoso zurdo Uros Kovacevic y el central Srecko Lisinac –ambos de Serbia–, y los italianos Luka Vettori, Simone Giannelli y Davide Candellaro.
La adición de Sosa, hombre que puede jugar como atacador opuesto o central, no supone un cambio en los planes del Trentino, que mantendrá la base de su plantel tras ganar el Mundial de Clubes en Polonia, a finales del 2018, y la CEV Cup frente al Galatasaray turco en marzo último.
Además, ellos disputaron la final de la Supercopa italiana (perdieron 3-2 con el Modena) y culminaron segundos (22 victorias y cuatro derrotas) en la clasificatoria de la Serie A, evento en el que ahora, en semifinales, intentan recuperarse de dos derrotas (2-3 y ) contra el Civitanova, finalistas de las dos últimas ediciones.
De cara a la temporada 2019-2020, Sosa sería una interesante alternativa de cambio y aportaría nuevos bríos al Trentino como uno de los jugadores más jóvenes de la plantilla, superado por Giannelli, el central Lorenzo Codarin y el líbero suplente Carlo de Angelis, todos de 22 años.
Con el fichaje de Sosa, ya son cinco los jugadores del “caso Finlandia” que apuntan al profesionalismo. Cepeda y Alfonso juegan en Turquía, mientras Albo y Calvo lograron vínculos con el equipo Zahra, de la liga del Líbano, aunque pueden dar el salto a un circuito europeo para la siguiente campaña.
