Tom Brady finalmente tiene su sexto anillo, pero no sería posible sin la ayuda de sus amigos Sony Michel, Julian Edelman, Rob Gronkowski y Stephon Gilmore, líder de una línea defensiva que sepultó a Los Ángeles Rams y lanzó a New England Patriots.
Michel anotó en acarreo de dos yardas a mediados del último cuarto, poco después de que Gronkowski consiguiera el primero y gol con una espectacular zambullida.
Por su parte, Edelman tuvo 10 recepciones para 141 yardas para coronarse como MVP, mientras Gilmore interceptó un pase a cuatro minutos del final y sentenció a los Rams, derrotados con pizarra de 13-3.
Los Patriots ganaron así su sexto Super Bowl desde el 2001, e igualaron a los Pittsburgh Steelers como los máximos ganadores de la historia. Además, sumaron su segundo título en tres años.
El duelo no fue bonito ni espectacular, marcado por una férrea defensiva que dejó la puntuación más baja en 53 ediciones de Super Bowl.
Michel anotó el touchdown de la victoria con 7:00 minutos en el reloj, para culminar una de las pocas marchas explosivas del encuentro. En la misma, los Patriots hilvanaron cinco jugadas y 69 yardas, 47 de ellas a la cuenta de Gronkowski, quien mostró toda su clase justo en la recta final, tras superar unas leves molestias en la primera mitad.
En el apartado defensivo, Gilmore prácticamente sentenció a los Rams siete jugadas después, cuando interceptó el envío de Jared Goff en la yarda 4, con lo cual le puso fin a la única ofensiva peligrosa de Los Ángeles en toda la noche.
Así desaparecieron las aspiraciones de la franquicia de los Rams de levantar su primer trofeo Lombardi desde el 2000, cuando todavía radicaban en San Luis.
Los Rams se sumieron en un profundo pozo de mediocridad, algo raro para la segunda mejor ofensiva de la NFL en esta temporada. Jared Goff, Todd Gurley y Robert Woods no anotaron puntos hasta el tercer período.
No obstante, la defensa de los Patriots merece todo el crédito, pues en las finales de conferencia también dejaron sin puntos en la primera mitad a Kansas City Chiefs, el mejor ataque de la NFL.
Desde temprano se evidenció que no sería un partido ofensivo. El primer pase de Brady fue interceptado, la primera serie ofensiva de los Rams duró tres jugadas y 51 segundos, y ambos equipos se combinaron para un solo viaje a la zona roja.
Por los Patriots, fue fundamental la profundidad de Edelman, la oportunidad de Gronkowski y la solidez de Michel en los acarreos, pero también el pateo de Stephen Gostkowski, quien consiguió dos goles de campo.
El pateador de New England había fallado un tiro al inicio del encuentro, pero después abrió y cerró el marcador. Su último disparo de 41 yardas a 1:12 del final hundió por completo a los Rams.
Los Ángeles no anotaron touchdown y solo subieron tres unidades a la pizarra, a la cuenta de Greg Zuerlein, quien pateó un gol de campo de 53 yardas al final del tercer cuarto para igualar las acciones 3-3.
Con ese marcador finalizó el tercer cuarto, la primera vez que no se anotan touchdowns al cabo de los primeros tres periodos en la historia del Super Bowl.
La sequía más larga previa sin un touchdown fue en el Super Bowl de 1989 entre los Bengals y 49ers, cuando el primer touchdown fue anotado cuando faltaban 50 segundos para el final del tercer cuarto.
No es de extrañar entonces que los 16 puntos totales del duelo sean la menor cantidad de la historia del Super Bowl, por debajo de los 21 combinados entre los Miami Dolphins y los Washington Redskins en 1973.
Desde el 2002, fecha del debut de Brady en la NFL, el mariscal de campo y el entrenador jefe de los Patriots, Bill Belichick, han participado en nueve ediciones de Super Bowl y han ganado seis, únicos en la historia con semejantes números.