Después de Londres 2012, y el descalabro olímpico, Santiago Antúnez y Dayron Robles, decidieron pedir la baja del equipo nacional de atletismo, y la baja, sin miramientos, le fue otorgada. Meses después, en junio de 2013, ambos reaparecieron sorpresivamente en Torino, Italia: un mitin en el cual Robles compitió bajo la bandera de ningún país y sin el amparo de club alguno. La Federación Cubana de Atletismo largó un comunicado en el que condenaba la actitud peregrina de Robles, y Robles respondió con la contratación por el club Mónaco.
El caso tomó ribetes mediáticos insospechados. Las declaraciones de Alberto Juantorena, como vocero institucional, fueron tajantes, absolutas. Robles no pertenecía al movimiento deportivo nacional y no podría competir nuevamente por Cuba.
Ambos regresaron al país hace poco más de un mes. Actualmente Robles entrena en un gimnasio particular de Cojímar, y Antúnez lo acompaña. Parecen ambiciosos, enteros, dispuestos a retomar lo perdido. Pero, ¿qué es lo perdido? ¿Un país? ¿Un privilegio? ¿Un título olímpico? ¿Un récord del mundo?
OnCuba publicará próximamente una entrevista exclusiva con Dayron Robles y contactó con Alberto Juantorena, Presidente de la Federación Cubana de Atletismo, quien nos dijo que se encontraba fuera del país (en Francia), por lo que no podría considerar la entrevista hasta su regreso a Cuba.
El corazón del hombre es perverso en cualquier grupo social, religioso o político. Cuando el poder se fija en el triunfo y no en quien lo logra, está dejando de lado su propósito social. El dirigente que ignora los factores objetivos que afectan el rendimiento de sus deportistas, y los desecha por no haber logrado una victoria, pronto recibirá de su propia medicina, porque esos deportistas desechados serán los factores objetivos que explicarán su fracaso como dirigente.
El sr.Alberto Juantorena ha de entender una cosa.Si no permite (en su ridícula y cavernícola actitud) que Dayron represente nuevamente a Cuba.Pues perderemos un representante y una posibilidad de medallas en esa disciplina.Aasí de sencillo.Si ya en Cuba el deporte es profesional (al menos nominalmente),no existe ninguana razón para que este corredor y campeón mundial no pueda representarno.Lo otro es ponernos nosotros mismos la soga al cuello.Por otro lado,lo mismo hay que decirle a los dirigentes del Béisbol.Si no permiten que los peloteros cubanos residentes en Estados Unidos nos representen en el Clásico Mundial.Más nunca ganaremos ese torneo,y el béisbol cubano (o el equipo nacional cubano,mejor dicho) seguirá perdiendo credibilidad…
Es así de sencillo,no se compliquen demasiado jeje.
Sería interesante contrastar las declaraciones de Juantorena con los detalles y aclaraciones de Dayron en esta entrevista… Hace falta que otorgue la entrevista y explique algunas cosas: ¿cómo puede sancionarse a una persona después que solicitó y le concedieron la baja del equipo? ¿qué falta de disciplina/ética respecto del equipo del que ya no era parte? ¿puede un cubano presentarse a competir en competencias municipales, provinciales y nacionales y clasificarse para un evento internacional sin “ser” del equipo Cuba? ¿el dinero en CUC que le pagan a los atletas en activo y “glorias del deporte” es de por vida, o mientras sigan formando parte del “movimiento deportivo cubano” en ese caso, dónde cae Dayron, gloria del deporte o ex deportista?
Habría que ver qué análisis hacen del caso y si deciden que es un tema cerrado y calabaza, calabaza, cada uno pa’ su casa….
En fin, muchas interrogantes en espera de respuestas.
¿Y por qué no transcriben esta entrevista como hicieron con la de Dayron?