Con los primeros rayos y el Surya Namanskar o Saludo al Sol, Alicia Hernández comenzó el día. No resultó un ejercicio nuevo, pues lleva más de cinco años de experiencia. Lo novedoso en esta ocasión es que viajó de Cienfuegos a La Habana para compartir junto a otras personas la celebración del Día Mundial del Yoga, un evento único que tuvo lugar por vez primera en todo el orbe.
El inicio del programa extendido este fin de semana en La Habana fue muy similar al protocolo oficial que se siguió en el resto de las regiones del planeta como China, Filipinas, Francia, España, Estados Unidos, Afganistán, Reino Unido. Los días 20 y 21 de junio individuos de diferentes culturas, religiones, estilos de vida se reunieron en plazas y rodaron sus esteras para frente a cientos de personas ejecutar las asanas o posturas descritas en esta tradición milenaria.
En la Isla, el regalo de la embajada de la India devino un programa de clases magistrales, talleres y conferencias. Cientos de yoguis no sólo de la capital sino también de Granma, Holguín, Las Tunas, Santiago de Cuba y otras provincias concurrieron en el Círculo Social Gerardo Abreu Fontán, sede de las actividades.
Alicia Hernández, una de estas yoguis, afirmó sentirse muy agradecida por la selección de una jornada especial. Para ella esta práctica ha resultado muy beneficiosa, pues en épocas pasadas sufrió un tumor maligno y hoy asegura que el yoga la ha ayudado a restablecer “la sanación del cuerpo”.
En declaraciones para OnCuba el embajador del país asiático, Chinthapally Rajasekhar, afirmó que “el yoga es parte de una tradición antigua que promueve la salud entre la mente, el cuerpo y el alma”.
“El yoga promueve la paz y la armonía. La energía interna se vigoriza y mantiene el cuerpo físicamente fuerte. Pero esto es solo el comienzo, pues luego proporciona un estado positivo de la mente. Nuestro Primer Ministro Narendra Mondi, ha afirmado además que puede ayudar en el cambio climático, porque quien practica yoga aprecia verdaderamente lo bello de la naturaleza,” aseguró.
El diplomático ratificó la auténtica relación de amistad entre ambas naciones que data de inicios de la Revolución. Y agregó que la tradición aquí no resulta nueva, pues posee una historia de 25 años gracias al trabajo de la Asociación Cubana de Yoga.
Por estos días la conmemoración también resultó importante en Holguín, Matanzas, Santiago de Cuba y Sancti Spíritus. El Día Mundial se convirtió en “el momento más popular”, según las propias palabras del funcionario indio.
El Sr. Rajasekhar, quien practica yoga al menos tres veces a la semana, también se sumó al jolgorio del sábado y participó de la clase impartida por la profesora María Calá. Al salón del Fontán, asistieron no sólo parte del cuerpo de la sede diplomática india en Cuba, sino también Ismael Clark, presidente de la Academia de Ciencias de Cuba y grandes deportistas como Ana Fidelia Quirot, Estela Rodríguez y Alberto Juantorena.
El primer ministro indio Narendra Modi presentó la instauración de este día el pasado septiembre a la Asamblea General de Naciones Unidas. La propuesta resultó tan impactante que apenas dos meses después, el 7 de noviembre de 2014, recibió el apoyo de 177 países. Así el 21 de junio, fecha del solsticio de verano (el día más largo del año), fue escogido para promover que las personas a través del yoga asumieran estilos de vida más saludables.
La India destinó en esta ocasión más de un millón de dólares para el impulso de una campaña que alcanzó más de 190 países, según reportes llegados de este gobierno. Entre las pretensiones de la nación, “una de las más espirituales del planeta”, se encuentra que la UNESCO declare el yoga Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.